Leo con estupor en un medio informativo local un artículo con el siguiente titular a dos páginas: “Costas autoriza a Sagunto a derribar las pistas de tenis y aparcamiento de la playa”. Sorprendido porque yo, como presidente del Casino no sé nada de este tema, sigo leyendo y me entero de que “las pistas de tenis del Casino y el aparcamiento que gestiona la Asociación de Minusválidos de Sagunto tiene los días contados”.  No entiendo nada, porque pienso que no hace nada que Costas nos ha facturado el Canon por la ocupación de esos terrenos en los últimos años, a excepción del 2015 que me imagino vendrá más adelante… Y tenemos pendiente de aprobación una nueva concesión…

En fin, sigo con la lectura y parece ser que con estos derribos la Demarcación de Costas permitirá al Ayuntamiento “ampliar el proyecto de la futura Plaza de la Concordia”, según dicen ha comentado al periódico el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Sagunto, Pablo Abelleira, quien ha destacado que esto posibilita crear una gran plaza pública de 11.300 m2, para lo que se dotará presupuesto en 2017 y se contará con las ideas y opiniones que vía Internet faciliten los ciudadanos. ¡Y a nosotros no nos han dicho ni pum!¡pues empezamos bien la concordia!

Pues bien, aunque el aparcamiento ya hace meses que no funciona, con lo que no hay perjudicados, las pistas de tenis pertenecen a un club, de los varios que tiene el Casino R.C. que recordemos cuenta con cerca de 800 socios, aunque, claro está, no todos juegan al tenis, igual que otros juegan sin ser socios (pues el Casino está abierto a todo el mundo) y,  si es cierto lo que dice el señor Abelleira,  creo que merecemos, cuando menos por ética, que se nos comunique una decisión de este tipo, antes de enterarnos por la prensa. Claro que, cuando después sabemos que esta falta de información la han sufrido también los partidos políticos de la oposición e incluso el Delegado del Gobierno Valenciano, que nos consta también era desconocedor del tema… ¡qué vamos a esperar nosotros! ¡La ética por los suelos!

Y lo peor del caso es que en contra del cacareado “desahucios no”, sin que medie diálogo alguno, se vislumbran cientos de deportistas desahuciados, sin que el Ayuntamiento tenga una idea clara de qué hacer en esa gran plaza, porque, al parecer, carente de ideas que proponer, emplaza a los ciudadanos a que lo hagan. Pues ahí va una: dejen ustedes las pistas que quizá sea una buena idea para que la gente de todas las edades sigan practicando el noble deporte del tenis. Ah, y así se evitarán engorrosos desahucios.