El miércoles pasado, en el transcurso del encuentro empresarial de Asecam, después de escuchar al representante de Mercadona, Gregorio Rubio, me quedó bastante claro que, entre lo anunciado por la empresa en diciembre de 2016 y lo dicho en el citado evento empresarial, hay una diferencia bastante considerable. No es lo mismo, ni parecido siquiera, que en Parc Sagunt se construya el bloque regulador de esta cadena de supermercados para abastecer a todos los bloques reguladores que tiene la compañía distribuidos en España, que levantar el almacén que se encargará de abastecer a las 255 tiendas que tiene la firma en la Comunidad Valenciana y Baleares. No estoy quitando importancia a lo que la empresa de Juan Roig está construyendo en Sagunto, pero, se mire como se mire, el movimiento no va a ser el mismo y, por consiguiente, tampoco su repercusión.
Si encima, esto no es más que una modernización de las instalaciones que la empresa tiene en Ribarroja del Turia y, por si faltara algo, el millar de empleados que hay allí se van a venir a trabajar aquí, parece evidente que, entre diciembre de 2016 y la actualidad, se ha producido algún cambio en la estrategia de la compañía. Es verdad que la empresa tiene adquiridas otras parcelas en el parque empresarial, aunque de menor tamaño, así pues, habrá que ir dejando que pase el tiempo para ver como se va definiendo este proyecto.
Entretanto, los accesos al parque empresarial siguen esperando. La secretaria autonómica, Blanca Marín, ha confirmado a este periódico que la partida presupuestaria ya está recogida en los presupuestos autonómicos de 2019, sin embargo, el alcalde del municipio, Francesc Fernández, no tiene ninguna duda a la hora de buscar responsables, asegura, en la entrevista que se publica en esta misma edición, que los de la Generalitat van un poco lentos. El alcalde, que está metido en todos estos guisos, sabrá porqué dice lo que dice y le echa las culpas al Gobierno valenciano, donde, por cierto, su partido gobierna con el PSOE.
Las cosas vas moderadamente bien y esperemos que sigan así, porque en la primera etapa de Parc Sagunt, cuando ya estaba todo el suelo adjudicado, llegó la crisis y todo se quedó en nada. Ya se que no es la misma situación, pero, por favor, que no sea por falta de respuesta de la administración. Es bueno que se hable del Parc Sagunt II, sobre todo ahora que vienen las elecciones municipales y autonómicas, pero dejemos a un lado el cuento de la lechera y consolidemos lo que ya tenemos. Hagan el favor de ponerse de acuerdo, de terminar los accesos al parque, de acometer las conexiones ferroviarias y dejen el producto terminado. Qué menos, ¿no?
