La deuda o la vida

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Viernes, 27 Julio 2012 02:00

Hace apenas un año los dos grandes partidos de este país (PP-PSOE) decidieron, con alevosía y nocturnidad, modificar la Constitución Española sin la decencia ni principio democrático de consultar al pueblo mediante la realización de un referéndum vinculante. La modificación del artículo 135 establecía que el pago de la deuda gozaría de prioridad absoluta por encima de cualquier otro gasto público. A partir de aquí el Estado de derecho al trabajo, a una vivienda digna, a la sanidad,  a la educación… pasa a un segundo plano.

El pago de la sacrosanta deuda a los bancos alemanes, franceses, norteamericanos e ingleses, así como el rescate con dinero público a los bancos en quiebra españoles, supone el desmantelamiento del medio estado del bienestar que hemos conocido. Eso lo sabe perfectamente el PP y el PSOE, de hecho las dos fuerzas políticas han firmado el Pacto Fiscal y de Estabilidad que conduce al ajuste y empobrecimiento de la población.

La deuda en este país es ilegitima e impagable y supone una nueva estafa y sometimiento a los dictados de aquellos que han generado esta crisis, llámense Botín, Francisco González, Rodrigo Rato…y otros especuladores que obtuvieron grandes beneficios en el casino de la especulación financiera y ahora exigen al Estado y al conjunto de la ciudadanía que carguen con sus deudas privadas. Y digo privadas por que en este país la mayor parte de la deuda es privada. La deuda privada, que ha asumido el Estado como propia, es ilegitima e impagable y requiere de una auditoria al igual que han llevado a cabo otros países que se han negado a pagar la deuda. Deudas ilegitimas son aquellas deudas que proceden de préstamos que, por como fueron concedidos, gestionados y en aquello que financian, de forma directa o indirecta, atentan contra la dignidad de la vida de la ciudadanía. Son las deudas que se derivan de acuerdos financieros (o bien en lo que establecen, en lo que financian o en los impactos que causan) violan los derechos humanos. Pagar la deuda a costa del sufrimiento de los dependientes, pensionistas, parados y población general, requiere, al igual que hiciera países como Islandia, que la ciudadanía se plante y diga no al pago de una deuda a banqueros que anteriormente han amasado fortunas con la especulación inmobiliaria o la participación con acciones en el negocio de la industria armamentística.

La otra solución que nos ofrecen es el rescate global, camino que supondría mayor sufrimiento, si cabe, para la población. En aquellos países que han sufrido el rescate, como Grecia, Irlanda o previamente  experiencias como Argentina y otros países de América Latina y África, el denominador común ha sido la imposición del FMI de políticas criminales que no solo no han reducido la deuda sino que han condenado a la miseria a la población con las mismas recetas neoliberales de siempre, basadas en privatizaciones, reducción de sueldos, abaratamiento de los despidos, subidas del IVA…

Rajoy, como buen discípulo de la escuela de Chicago y sumiso ejecutor de los intereses del capital, ya ha iniciado a lo bestia estas medidas que están traduciéndose en 6 millones de parados, 7 millones de trabajadores que cobran por debajo de los 1.000 euros, 1.7 millones de trabajadores que no reciben ninguna prestación por desempleo, 21% de la población por debajo del umbral de la pobreza, de cada 5 euros 4 los paga las rentas del trabajo y 1 la del capital, se ha reducido la prestación por desempleo, se ha congelado el SMI   —uno de los mas bajos de Europa—, se ha introducido el copago-repago en la sanidad, se ha privatizado el sector estratégico público, más de 170.000 cuidadores de dependientes se les ha recortado un 15%, en junio de este año habían 72.000 autónomos menos, se ha subido el IVA, se ha aumentado las tasas académicas en un 66%, el paro entre los jóvenes menores de 25 años alcanza el 25%, se ha cerrado plantas de hospitales, se aumentan las ratios en los colegios, se prepara una bomba de relojería con la modificación de la ley de bases de régimen local que nos retrotrae a la época franquista y da a los Ayuntamientos un papel residual… Todo esto y más para reducir el gasto y pagar la deuda a los bancos acreedores.

Paralelamente a la negación del pago de la deuda ilegitima debemos recordar y tener presente que en este país hay dinero —explicación que requiere de otro artículo de opinión— tal y como demuestra el Sindicato de Técnicos de Hacienda —Ghesta— en un informe reciente donde plantea que se puede, en un periodo relativamente corto,  tocando simplemente algunas cuestiones del sistema impositivo de las renta del capital, ingresar por parte del estado 63.000 millones de euros.  Es momento de rebelarse, es momento de organizarse, es momento de articular una respuesta y de decir  NO AL PAGO DE UNA DEUDA ILEGITIMA E IMPAGABLE. En nuestras manos está, por que somos mayoría, elegir entre la deuda o la vida.

Fernando López Egea López es portavoz
del Grupo Municipal de Esquerra Unida
 en el Ayuntamiento de Sagunto
Modificado por última vez en Viernes, 27 Julio 2012 02:00
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