En el año
1993, se dijo por los técnicos de la Confederación Hidrográfica
del Júcar en el Ayuntamiento de Algar, siendo Alcalde de este
municipio quien suscribe, que las principales funciones que iba a
tener dicha obra eran, por una parte, el aporte a los acuíferos
de la zona del Camp de Morvedre y, por otra parte, aumentar los
recursos superficiales de la cuenca media del Palancia para
incrementar el suministro de agua a la zona regable de la Acequia
Mayor de Sagunto, algo que, con fracasada insistencia hasta la fecha,
vienen reclamando los regantes.
Para poder
cumplir esta última finalidad, es obvio que la presa necesitaba
contar con compuertas, las cuales, ya “ finalizada la obra
“, seguían sin ser instaladas. El 11 de septiembre de 2002, Jaume
Matas, el que fuera Ministro de Medio Ambiente del gobierno de
José María Aznar y también Presidente de la Comunidad Autónoma de
Baleares, a preguntas del diputado socialista valenciano en el
Congreso de Diputados, Francisco Arnau, dijo algo tan
peregrino y sorprendente como que “los aliviaderos de la
presa de Algar se han diseñado con la tipología de labio fijo y no
lleva compuertas”.
No consta quien o quienes asesoraron al señor Matas sobre la
cuestión pero lo cierto es que, ¡por
fin!, la presa ya tiene
compuertas.
Pero
es que la cosa no acaba ahí. A día de hoy, continúa sin resolverse
otro problema de vital importancia en relación con la presa de Algar
: el de la Acequia Mayor
de Sagunto a su paso por
la propia presa. Como todo el mundo sabe, la Acequia Mayor de Sagunto
arranca aguas arriba de la presa, en el cauce del río Palancia, en
la toma del azud de Sot de Ferrer (Castellón ), en la comarca del
Alto Palancia, pasando después por el “assut d'Algar”, en el
término de este municipio, para continuar hasta la presa,
atravesando la misma, y discurriendo hasta Sagunto, sirviendo al
riego de gran parte de la huerta de los pueblos de la comarca del
Camp de Morvedre.
Llegados
a este punto, es enormemente pesimista la noticia aparecida en los
medios de comunicación del día 11 del presente mes de mayo, con
motivo de la tradicional reunión anual que tiene lugar en el
“embalse del Regajo”,
con aistencia esta vez de la Consellera de Agricultura de la
Generalitat Valenciana, de un alto responsable de la Confederación
Hidrográfica del Júcar, de los Alcaldes y los Presidentes de las
Comunidades de Regantes de la zona, reunión en la cual los
representantes de los regantes tuvieron que escuchar de boca del
representante del organismo de cuenca que “no
hay dinero” ni
fechas previstas para hacer las obras que pudieran solucionar el
problema, si bien al parecer existe un proyecto cuya realización
importa nueve millones de euros.
Tales
afirmaciones contribuyeron a aumentar el pesimismo
de los regantes. El
Presidente de la Acequia Mayor de Sagunto, Francisco
Catalá, manifestó que
ello era un auténtico varapalo dado el desembolso que para muchos
regantes, sobre todo en verano, representa tener que mantener 18
pozos con un gasto de 35 euros la hora.
Todos
somos conscientes del momento difícil que atravesamos y que afecta
especialmente a las Administraciones Públicas, pero quizá los
regantes esperaban mayor apoyo de parte de la
representante de la
Generalitat en lugar de
defender la postura de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Al
menos eso es lo que se dijo en algún medio de comunicación.
En
el año 2002, quien esto suscribe, publicó en un medio de
comunicación un comentario titulado “La presa de
Algar para las calendas griegas”, utilizando
dicha frase del emperador romano Augusto (año 63 a.C.- año 14
d.C.), cuando daba a entender que los pagadores morosos no cumplirían
nunca con su obligación de pagar porque en el calendario griego no
había “calendas”, es
decir, el primer día del mes, como sí existía en el calendario
romano. Y en el referido comentario del año 2002 decía que había
motivos para pensar que la presa de Algar estaría finiquitada “ad
calendas graecas”, o sea ,
nunca o en una fecha incierta e indefinida. No he querido referirme,
por falta de espacio, a cuestiones tales como la falta de
coordinación y colaboración entre el Ayuntamiento de Algar y la CHJ
respecto a la zona de recreo, en estado de semiabandono, o al plan de
emergencia del cual oficialmente el Ayuntamiento carece de
información. Uno no quiere ser pesimista como los regantes del Camp
de Morvedre pero, lamentablemente, nos tenemos que remitir a los
hechos y terminar con la pregunta del inicio: La
presa de Algar, ¿es un problema insoluble?
Josep
Catalunya Albert
Portavoz del grupo socialista y ex-Alcalde de
Algar.