Impuestos

Viernes, 29 Noviembre 2019 20:00

La verdad sea dicha, resulta bastante revelador que, por ejemplo, los ciudadanos que residimos en el municipio de Sagunto ingresáramos en Hacienda por el IRPF de 2017 la cantidad de 95.839.564 euros y que, de lo que se denomina retorno directo, que es lo que ingresa el Ayuntamiento de Sagunto en su capítulo IV de los presupuestos, procedente de la aportación de Estado, la cifra alcance los 16.344.268 euros, lo que representa un 17,05% del total, o sea, poco más de 17 euros por cada 100 abonados. En el conjunto de los 16 pueblos de la comarca, el montante pagado por IRPF en 2017 ascendió a 133.053.852 euros, de esta cifra se produjo un retorno directo de 23.880.197 euros, es decir, un 17,94%.

Pero aquí no queda la cosa, al montante de IRPF habría que añadir lo que se recaudó en todo 2017 por el Impuesto de Sociedades de las empresas afincadas en la comarca o los impuestos indirectos del IVA y de carburantes que percibe el Estado en las 16 poblaciones, más las aportaciones a la Seguridad Social de los trabajadores y autónomos, y los impuestos autonómicos y municipales. En definitiva, que son muchos los tributos que se pagan a las administraciones públicas, especialmente a la central.

Lo mejor de todo es que, cuando desde el Ayuntamiento de Sagunto se llama a Costas para que pongan en hora el paseo marítimo o se de solución al problema de las playas del norte del municipio, que están hechas un asco, se argumente que no hay dinero. O que vayamos a la Confederación Hidrográfica del Júcar para ver si se construye el puente sobre el río Palancia, que una las playas del Puerto y Canet, y nos digan que sí, pero que lo paguemos nosotros. O que vayas a la sanidad pública para que te miren de algo y, dependiendo de la especialidad, te den cita para dentro de seis meses o un año.

Comprendo que para todos no haya y que siempre sea poco lo que se ingresa. ¿Cómo no lo voy a entender? Tenemos que mantener una administración inmensa, carísima e inoperante, donde la corrupción también se lleva su buena parte. De cuando en cuando se rescata algún banco o autopista, y, por si faltara algo, hay que seguir gastando dinero, como si fuera confeti, en la obra pública, ahora, después de tanto aeropuerto inútil, construyendo kilómetros de AVE que van de ningún sitio a ninguna parte, y todo, para que las empresas de siempre sigan chupando del presupuesto. En fin, que esto es un suma y sigue.

Por cierto, hay que mencionar que nuestro alcalde, Darío Moreno, ha estado a la altura, dando pronta solución a los problemas de transparencia que denuncio IP la semana pasada. Al César lo que es del César, ahí queda dicho.


Si le ha interesado esta información, puede unirse a nuestro canal de Telegram y recibirá todas las noticias que publicamos para el Camp de Morvedre. Síganos en https://t.me/eleco1986

Más en esta categoría: « Opacidad Ganar tiempo »

 

 

SUCESOS

SALUD