En la Comunidad Valenciana hemos realizado grandes restructuraciones en los últimos meses; hemos ajustado nuestros gastos respecto a nuestros ingresos y hemos conseguido reducir nuestro déficit. Pero todo este esfuerzo necesita del respaldo del gobierno central con una financiación justa que nos permita equilibrar nuestras cuentas.

En el Partido Popular de la Comunidad Valenciana y en la Generalitat, con nuestro Presidente Alberto Fabra al frente, seguimos luchando por conseguir una financiación más justa para la Comunitat Valenciana que nos ayude a salir de la crisis. No pedimos más que los demás, pedimos un reparto equilibrado. Ni más ni menos que lo que nos corresponde.

Ya tenemos las cuentas liquidadas del ejercicio 2011 y confirman, una vez más, que la Comunitat Valenciana sufre una grave discriminación en materia de financiación. En 2011 recibimos 204,65 per cápita euros menos que la media; es decir, somos la tercera comunidad por la cola, sólo por detrás Canarias y Murcia. En términos globales, en 2011 recibimos 1.047 millones de euros menos que la media. Una cantidad que nos permitiría mejorar notablemente la situación de las cuentas públicas y nos facilitaría el mantenimiento de la calidad de la Educación, la Sanidad y por lo tanto, vamos a seguir reivindicando un cambio en el modelo de financiación, de manera que se acabe definitivamente con la infrafinanciación estructural que la Comunitat Valenciana padece, de forma injusta, desde hace décadas. Sin embargo, en tanto que la financiación es claramente asimétrica, el objetivo de déficit también debe serlo. 

 

Para la Comunitat Valenciana, alcanzar el objetivo del déficit no es una cuestión de reducción del gasto, ya que tiene unos gastos per cápita inferiores a la media, tanto en servicios fundamentales como en el resto de actividades. Gastamos de forma eficiente. De hecho, hemos hecho un esfuerzo titánico que nos ha llevado a ahorrar 2.000 millones de euros en el año 2012, el mayor ahorro de nuestra historia. Para la Comunitat Valenciana, alcanzar el objetivo del déficit supone un problema por los ingresos, en gran medida, debido al pernicioso sistema de financiación actual, pero también por la caída de ingresos por tributos propios como consecuencia de la crisis económica.

Por eso, seguimos negociando con el Ministerio de Hacienda un objetivo de déficit diferenciado que nos permita mantener los servicios básicos pese a la falta de financiación. Y esa es la verdadera batalla en la que estamos en estos momentos: la batalla en la que lo único que importa son los intereses de los Valencianos, su calidad de vida, su empleo y su bienestar.

Esa es la preocupación del Partido Popular de la Comunitat Valenciana y ésa es la línea de actuación de la Generalitat. Lo primero, ahora y siempre, los ciudadanos valencianos.