El Acero espera completar mañana sábado el penúltimo paso hacia tercera división. Será en el partido de vuelta de la primera eliminatoria de la promoción de ascenso, cuando los rojiblancos reciban en el Fornás desde las 19 horas al Alberic con la ventaja del 0-1 del encuentro de ida.
La principal preocupación porteña para este encuentro son las lesiones de Kiko Insa y Redondo, que acabaron maltrechos el encuentro de la semana pasada y no han podido entrenar junto al resto de sus compañeros durante toda la semana.
Más allá de esta cuestión, el técnico acerista, Dani García, cree que "lo más importante es no conceder faltas innecesarias, mantener la máxima concentración durante los 90 minutos y no cometer errores".
Otra de las cuestiones en las que ha trabajado con sus jugadores es la forma de encarar el choque, ya que "no debemos especular con la ventaja que tenemos, porque eso les daría ventaja. Tenemos que buscar el gol desde el principio", explica Dani.
En cuanto a la presencia de aficionados, los rojiblancos esperan que la nueva tribuna del Fornás pueda registrar el primer lleno de su reciente historia. Este empuje y la superioridad porteña deben ser suficientes para sellar la clasificación que llevaría a los aceristas a la segunda eliminatoria, donde el Muro se presenta como previsible rival.
