Galván en la llegada
Fermín Galván cumplió su objetivo de acabar los 100 Kilómetros Pedestres Villa de Madrid, que disputaron ayer domingo su XXV edición con una participación en torno a los 130 corredores.
El atleta porteño completó de esta forma la primera carrera de la semana sobre esta distancia, ya que el próximo sábado acudirá a Calella para seguir el exigente programa de entrenamientos que le debe conducir a la disputa el próximo año del Mundial de 24 horas.
El deportista buscaba en Madrid «el menor desgaste posible», que le sirvió para ser vigésimo cuarto en la general y segundo en su categoría de M-50.
Las 10 horas, 32 minutos y 30 segundos quedan muy lejos del mejor registro de Galván en esta prueba, aunque este año su objetivo era completar el centenar de kilómetros en una jornada que alternó el frío y el calor en su climatología.
En una edición sin premios en metálico, que limitó la presencia de corredores de élite, el recorrido volvió a dar muestras de su dureza, con continuas cuestas y toboganes que la convierten en una de las carreras más duras sobre 100 kilómetros de asfalto.
En el total de 10 vueltas sobre este circuito, Fermín completó la primera en 54 minutos y 35 segundos, un tiempo que fue estirando al paso de la jornada hasta completar el último giro en 1 hora, 11 minutos y 17 segundos.
