Mario Cereceda lamenta que si bien «nadie niega que la falta de transporte público digno en toda la comarca es uno de los principales problemas del día a día de la gente»; hasta ahora, «en cambio, nadie ha denunciado hasta ahora lo que desde Iniciativa Porteña consideramos que ilustra muy bien el trato de las administraciones hacia los pueblos sin ayuntamiento propio como El Puerto: no tenemos visibilidad, y por tanto, se nos margina de manera incluso absurda, como en el caso que venimos denunciando hoy». Además, el problema crecerá exponencialmente en cuanto aumente la población de Puerto de Sagunto con la llegada de la planta de Volkswagen.
Cereceda añade que «la situación es exageradamente alarmante: nos llegan fotos y vídeos todas las semanas y la propuesta del equipo municipal liderada por Darío Moreno es no hacer nada y esperar «sine die» hasta que la ATMV actúe».
El vicepresidente de Iniciativa Porteña, Mario Cereceda, insiste una vez más en que «la falta de transporte público suficiente viene siendo un problema recurrente al que no se le quiere poner solución. Es urgente implementar acciones creativas para una ciudad del tamaño de El Puerto, con casi 50.000 habitantes, con el fin de asegurar que todos los residentes puedan acceder a sus lugares de trabajo o estudio, así como disfrutar de su tiempo de ocio, sin verse obligados a enfrentar largas esperas o presenciar la frustrante situación de que el autobús pase de largo al no tener capacidad para recoger a más personas.».
Asimismo, el joven miembro de Iniciativa Porteña demanda que «la solución a medio y largo plazo no pasa por los autobuses, que no pueden competir ni en capacidad ni en frecuencia con el tren o el Metro. Hay que mejorar el transporte público en la ciudad y ofrecer alternativas a un sistema de autobuses que tiene unas limitaciones claras».
El joven de Iniciativa Porteña propone «no caer en las excusas de ADIF o la Generalitat, que siempre alega problemas para no hacer nada; si en Rafelbunyol dicen que las vías acaban en un cul-de-sac, tenemos poder defender que no es cierto que las vías caben perfectamente… pero no hay voluntad».
