Ciudad

El edil de Hacienda, Sergio Muniesa, presentó ayer ante los medios el borrador de presupuestos 2014, una propuesta que pretende llevar al pleno en la primera sesión que se celebre en septiembre, y que será el quinto intento de aprobar unas cuentas municipales en el ayuntamiento de Sagunto, consistorio que lleva utilizando los mismos presupuestos municipales desde el año 2009 ,a pesar de que estos son unos presupuestos calculados con unos niveles de ingresos anteriores a las crisis, especialmente en lo que a impuestos por construcción se refiere. Este hecho, sin embargo, no es considerado como una debilidad por parte de Sergio Muniesa, sino como una demostración de la buena gestión de un equipo de gobierno que ha logrado cerrar los últimos años con superávit. «La experiencia de estos años demuestra que somos fiables y hemos logrado el objetivo de estabilizar las cuentas del Ayuntamiento. Es la cosecha de un esfuerzo continuado de este equipo de gobierno, que con un presupuesto prorrogado ha logrado no solo superar la situación de déficit de casi 7 millones de euros que nos encontramos, sino que además hemos conseguido 12 millones de euros de superávit para destinarlo a las familias que más lo necesitan a través de los dos planes de empleo que hemos puesto en marcha en la ciudad en los dos últimos años. Este balance positivo lo hemos invertido en bienestar social, empleo y reducción de impuestos. Con esos antecedentes estoy convencido de que éste es el mejor presupuesto para nuestra ciudad» ha declarado.

 

58 millones de presupuesto
La propuesta de cuentas municipales para el 2014 contempla un gasto total de 58 millones de euros,de los cuáles casi 22 se van al pago de nóminas del personal, una cifra que, en todo caso, es algo mayor debido a los 7 millones que cuesta el personal de la SAG, y que no se computa como nóminas directas pero sí en los 11 millones de euros que cuestan los encargos que hace el ayuntamiento a su empresa pública.
El edil de presidencia ha señalado, en todo caso, la reducción que se ha hecho en el gasto corriente—gracias a iniciativas como la central de compras o la instalación de bombillas de bajo consumo y reguladores de potencia—que ha quedado fijado en 13 millones de euros, cuando, según ha resaltado, ha habido años en que esta partida llegaba a 30 millones de gasto.

Poco se ha desvelado sobre las novedades del nuevo presupuesto, puesto que aún ha de ser sometido a posibles modificaciones a la hora de conseguir los votos necesarios para aprobarlo, pero Sergio Muniesa ya ha destacado que si bien el borrador no incluye muchas novedades—algo lógico si tenemos en cuenta que contempla un proyecto para un año, el 2014, que ya ha pasado su ecuador—pero sí que ha revelado que, de aprobarse, incluiría medidas como la financiación de bonobuses para parados, un aumento de subvenciones para entidades sociales dedicadas a la solidaridad y la discapacidad, así como la recuperación de las partidas de Cooperación internacional.
Además se contemplan 2,2 millones de euros en inversiones.

 

31 millones en impuestos directos
En el capítulo de ingresos el ayuntamiento espera recibir 14,2 millones de euros en transferencias de otras administraciones, pero la partida más importante será la de impuestos directos donde se espera recaudar 31 millones de euros. A esta cantidad hay que sumar 625.000 euros, en impuestos indirectos e ingresos patrimoniales.

La relación entre gastos e ingresos se cuadra finalmente, con lo que se ingrese por recaudación por tasas, cuya previsión ronda los 10,3 millones de euros, 72.000 euros registrados como operaciones financieras, y por último se contempla la enajenación de patrimonio, o lo que es lo mismo su venta, por valor de 1,7 millones. Estas cuentas permiten superar el desfase de 10 millones menos en ingresos que arrastra el consistorio desde que la crisis económica paralizó la construcción.
 
Objetivo el consenso
A pesar de que las últimas reformas del gobierno español permiten a un equipo de gobierno aprobar las cuentas en minoría—si un consistorio lleva varios ejercicios prorrogando sus presupuestos y vuelven a ser rechazados se pueden llevar a Junta de Gobierno—el edil de presidencia ha vuelto a asegurar que buscará el consenso de los grupos por encima de cualquier otra consideración para sacar estas cuentas adelante, como considera que «ha sido siempre nuestra política».