Presupuestos sociales

Escrito por Davinia Bono
Viernes, 09 Noviembre 2012 01:00

Nos encontramos en pleno mes de  noviembre, época en la que las diferentes administraciones, nacional, autonómica y local, elaboran, presentan o aprueban sus presupuestos generales para el ejercicio 2013. El primero de ellos fue el presentado por el Gobierno de la Nación, el cual tiene como principal objetivo la reducción del déficit público con un plan creíble. Durante este año ya se ha empezado a cumplir dichos objetivos: el déficit estatal hasta septiembre se ha reducido hasta el 3,9 % del PIB, como confirma Eurostat.

El objetivo ahora es reducir el déficit público del conjunto de las administraciones públicas hasta el 4,5%. Los Presupuestos hacen un ajuste presupuestario en el gasto público del 58% y prevén un incremento del 42% en los ingresos.
Pero si algo tenemos claro desde el Partido Popular es que, para poder pedir un esfuerzo a los españoles, nosotros hemos de ser los primeros en dar ejemplo, por ello, en dichos presupuestos generales se reduce el gasto de los ministerios el 8,9%. Se vuelve a reducir la subvención a partidos políticos, que cae un 42%, y a sindicatos y organizaciones empresariales, en un 20%.

 Aunque por desgracia se aumenta la partida para frenar los intereses de la deuda pública, fruto de la mala gestión del anterior Gobierno socialista. Los españoles tenemos que hacer frente a 38.590 millones de euros sólo en intereses. Y esta es solo una parte de la herencia que nos dejaron los que decían ver brotes verdes en nuestro país.

 Sin embargo, a pesar de las críticas de los “supuestos” partidos de izquierdas, los presupuestos generales para el 2013 son los más sociales de la historia. De cada 100 euros, 63 se dedican a gasto social. Las pensiones se revalorizan un 1%. El gasto en pensiones aumenta el 4,9% frente a 2012 hasta alcanzar un total de 121.557 millones de euros. Se mantiene el sueldo de funcionarios y recupera las pagas extra. Aumentan las becas: La partida de becas y ayudas generales a alumnos universitarios y no universitarios aumenta en 23 millones de euros. Por lo tanto, unos presupuestos que muestran la confianza en España y en los españoles para salir de la crisis.

 La segunda administración en presentar los presupuestos para 2013 fue la Generalitat Valenciana. Estoy segura que a todos nos gustaría que fueran de otro modo, que reflejaran grandes inversiones y que hubiera partidas para todo, pero la situación es la que es y los presupuestos se ajustan a ella, se centran en lo que de verdad importa: en las personas.

Lo que de verdad importa es garantizar la calidad de la sanidad, la educación y los servicios sociales. Lo que de verdad importa es trabajar en la creación de empleo. Por eso, 9 de cada 10 euros se destinan a gasto social. Más de 10.000 millones de euros. Lo que de verdad importa es que, en tiempos de vacas flacas, se optimice cada euro y que el tamaño de la administración no exceda de lo estrictamente necesario para mantener su eficacia. Una competencia, un departamento, una partida.

Lo que de verdad importa es que, lo poco que hay, se reparta de forma equitativa y llegue a donde más falta hace. A las personas que peor lo están pasando. Lo que de verdad importa es ser transparentes, ir de cara, contar la verdad a los ciudadanos y actuar en consecuencia. Los Presupuestos de la Generalitat no reflejan nada que no les hayan contado: la racionalización del sector público, la optimización de recursos en todas las áreas para mantener la calidad de los servicios básicos, la sustitución de las políticas de subvención por las de incentivos o las deducciones fiscales para quienes más lo necesitan. Por lo tanto, unos presupuestos dignos, centrados en las personas, sin renunciar a seguir trabajando para salir de la crisis.

Y por último, pero los más importante, por su cercanía, son los presupuestos municipales para el 2013. Un borrador de presupuesto que seguirá la línea del presentado en el ejercicio 2012. Nos hubiera gustado poder contar con la voluntad de la oposición para aprobar el presupuesto 2012, la tasa de deportes, la del conservatorio, o mercados, por ejemplo. Pero, sin embargo, he de reconocer que no les ha faltado iniciativa para plantear más gasto, sin financiación, sin ingresos, sin marco legal y con informes en contra.

Es muy fácil, desde la oposición, pedir más para todo. Lo difícil es conseguir hacer unos presupuestos dignos en un contexto económico tan adverso.
 No debemos olvidar la cantidad de servicios extraordinarios que presta el Ayuntamiento en enseñanza teatral, conservatorio o piscinas, los cuales deben ser pagados por sus usuarios, deben ser autosuficientes. No corresponde al resto de vecinos pagarlos. Y todo ello, sin perjuicio de las subvenciones que se puedan dar a personas en atención a su falta de recursos económicos o por cuestiones sociales. Pero parece que nada de esto importa tampoco a la oposición, visto su votación en el último pleno municipal.

 Sería bueno que, para responder a las necesidades de nuestros vecinos y especialmente a los que peor lo están pasando; para mantener el empleo en el Ayuntamiento, lográramos aprobar el presupuesto municipal de 2013. El borrador de presupuesto 2013 duplicará, con fondos municipales, las cantidades que asignen al Plan Conjunto de Ocupación la GVA y la Diputación, con la voluntad de poder subvencionar el doble de empresas y de trabajadores siempre con la intención de responder a las necesidades de nuestros ciudadanos y con la finalidad de favorecer nuevas ocupaciones.

 Pero, al igual que ocurre con los presupuestos generales y autonómicos, nuestra principal prioridad para este próximo año es seguir ayudando a las familias de nuestra ciudad que por motivo de la crisis se están viendo en situaciones de emergencia social.

Del mismo modo que en el presupuesto de 2012 se establecía un aumento significativo en estas partidas, para el del 2013, se planteará una subida aún mayor, siguiendo la dinámica de incremento de partidas sociales que este gobierno esta llevando a cabo desde su entrada en el Ayuntamiento.

Nos gustaría que la situación fuera distinta y no tuviéramos que aumentar dichas partidas pero es lo que, hoy por hoy, necesitan muchas familias de la Ciudad.
 Queda mucho por hacer y el municipio no necesita 16 concejales que se pongan de perfil, sino 25 concejales comprometidos. Lo han hecho en algunas ocasiones apoyando al gobierno y planteando iniciativas. Esa es la línea a seguir, la de ejercer el control del gobierno y la fiscalización pero, también, la de plantear propuestas o alternativas que fueran viables en lo económico, jurídico y técnico.

Davinia Bono Pozuelo es concejal de Servicios Sociales
del Ayuntamiento de Sagunto
Modificado por última vez en Lunes, 17 Diciembre 2012 19:41

 

 

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