La Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales ha llevado a cabo un detallado análisis de los presupuestos que los ayuntamientos españoles de más de 20.000 habitantes dedican a Servicios Sociales y Promoción Social, que ha hecho públicos el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
A partir de esta información oficial, la citada asociación ha efectuado una clasificación de los municipios, en función de la parte del presupuesto que destinan al gasto social, agrupándose en tres tipos: ayuntamientos excelentes en su inversión social, ayuntamientos precarios y ayuntamientos oficialmente pobres en servicios sociales.
Así pues, los ayuntamientos excelentes en su inversión social son aquellos que incluyeron en sus cuentas municipales un gasto por habitante y año superior a 100 euros en 2015 y que durante 2016 no han reducido esta aportación, que, en todo caso, deberá representar más del 10% del presupuesto total del consistorio. De los 350 municipios del Estado español mayores de 20.000 habitantes, reúnen esta condición un total de 12, entre ellos se encuentra el de Madrid, que de su presupuesto municipal destinó 100,78 euros por habitante en 2015 y 144,36 euros por habitante en 2016. Estas cifras reflejan claramente el cambio experimentado tras incorporarse un Gobierno progresista en el consistorio madrileño.
Frente a estos ayuntamientos que sí predican con el ejemplo su compromiso con el gasto social, se encuentran un total de 37, de los 350 mayores de 20.000 habitantes, que son calificados como oficialmente pobres en servicios sociales.
La Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, para encuadrar a los municipios dentro de esta categoría, señala que: «por analogía con las personas consideradas pobres, que son aquellas que tienen ingresos inferiores al 60% de la mediana de la renta, podemos considerar pobres en servicios sociales a aquellos Ayuntamientos con presupuestos inferiores al 60% de la mediana de presupuestos en esta materia del conjunto de ayuntamientos de más de 20.000 habitantes». En consecuencia, se encuadran en este grupo los municipios que, de su presupuesto, destinan menos de 36,9 euros por habitante y año para el gasto social. Aquí se localizan ciudades como Fuengirola, Mérida, Pontevedra, Aranjuez, Leganés, Pozuelo de Alarcón, Torrejón de Ardoz, Sant Vicent del Raspeig, o Torrevieja, todas ellas mayores de 50.000 habitantes.
Entre los municipios más desprendidos y los menos solidarios, se encuentran los considerados precarios, es decir, los que, superando los 36,9 euros por habitante y año de gasto social, no alcanzan la cifra de 50 euros por habitante, pero se quedan muy lejos del óptimo, que son los citados 100 euros por empadronado y año.
La lista de este grupo está formada por un total de 79 municipios, sin embargo la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales los agrupa a todos en el mismo ‘saco’: «al listado de 37 Ayuntamientos que hemos considerado oficialmente pobres en servicios sociales (gasto inferior a 36,09 euros por habitante y año, que es el 60% de la mediana del gasto del conjunto de Ayuntamientos), habría que añadir aquellos que, con un gasto inferior a 50 euros hab./año se pueden considerar precarios en esta materia. Es una relación de 116 Ayuntamientos con una inversión tan escasa, que dudamos de su capacidad para prestar los servicios y las prestaciones sociales más básicas a su ciudadanía».
Sagunto entre ellos
Dentro de este grupo, que incluye aquellos municipios con un gasto social inferior a 50 euros por habitante y año, se encuentra el Ayuntamiento de Sagunto, que destinó en el año 2015 un gasto anual percápita de 47,69 euros. Curiosamente, en el ejercicio de 2016 esta cifra se ha visto reducida hasta los 44,91 euros por habitante y años. Es decir, con el nuevo Gobierno tripartito de corte progresista la aportación presupuestaria de 2016, respecto del año anterior, ha descendido un 5,82%.
De acuerdo con estos datos oficiales, que la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales ha extraído del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, el municipio de Sagunto destinó a los servicios sociales en 2.015 un total de 3.097.179 euros, mientras que en 2016 esa cifra desciende hasta los 2.916.635 euros, lo que implica un recorte económico de 180.544 euros.
Para que el Ayuntamiento de Sagunto fuera sacado de esta lista negra debería de invertir en gasto social un mínimo de 50 euros por habitante y año, y para que se incluyera en la de los consistorios excelentes, el gasto social se debería de situar en un total de 6.494.400 euros, cantidad correspondiente a una aportación percápita y año de 100 euros.
