La multinacional cementera Lafarge ha presentado su Informe de Sostenibilidad 2011-2012 para España que recoge las acciones que han llevado a cabo durante estos dos ejercicios así como la inversión realizada en su política medioambiental centrada «en el fomento de la biodiversidad, la reducción de las emisiones de CO2, y la mejora de las instalaciones, además del esfuerzo para mejorar la seguridad y la salud de los trabajadores».
Entre los aspectos más destacables de este informe se encuentra la intención de la empresa de restaurar las canteras en las que se ubica a través de un Plan de Gestión de la Biodiversidad con actuaciones «que mejoran sensiblemente el entorno natural, como la creación de hábitats para especies de interés, la erradicación de especies invasoras y la introducción de plantas autóctonas de alto valor ecológico».
Otro de los asuntos importantes de este documento es la reducción de las emisiones de CO2 donde el grupo se ha puesto como objetivo la disminución de sus emisiones en un 33% hasta el año 2020 adoptándose diversos acuerdos con los proveedores españoles que posibilitan que el 100% del consumo energético proceda de energías renovables. Además están avanzando en la sustitución de combustibles fósiles no renovables por biomasa derivada de residuos.
«A pesar de la crisis económica que estamos viviendo, nuestros compromisos con la sociedad, con nuestros empleados y con el medio ambiente se van a seguir manteniendo intactos», aseguró el director general de Lafarge España, Isidoro Miranda.