El Alser visitó ayer el Hospital de Sagunto
El Alser BM Puerto afronta desde hoy y hasta el próximo 10 de enero unas merecidas vacaciones navideñas, después del intenso trabajo que le ha llevado a cerrar la primera vuelta de Asobal en la décima posición con 10 puntos, un registro que en las últimas temporadas ha servido para acabar salvando la categoría.
Más importante que esta clasificación, que sitúa a los rojiblancos 5 puntos por encima del descenso, son «las sensaciones que hemos transmitido, especialmente en casa, donde hemos dado muestras de una constante mejoría y una mayor confianza», según el entrenador Goran Dzokic.
En cualquier caso, el serbio ya piensa en la segunda mitad del campeonato, que se presenta «interesante y complicada», ya que 6 de los 7 primeros clasificados ligueros visitarán el pabellón polideportivo municipal de Sagunto desde febrero hasta mayo.
En este sentido, el técnico rojiblanco cree que «nuestros resultados en casa marcarán hasta donde podemos llegar, siempre que mantengamos el ritmo que llevamos últimamente como visitantes». Sobre esta mejoría experimentada durante el último mes, cuando se ha encontrado «el equilibrio entre defensa y ataque», Dzokic asegura que «llegamos al final de la primera vuelta en el mejor momento físico y de juego, como demuestran las buenas segundas partes que hicimos».
Este punto álgido ha coincidido con la llegada del serbio Ivan Lapcevic, quien «nos ha hecho más compactos y nos ha aportado un extra de madurez en defensa», según el entrenador del Alser. En cuanto al ataque «ha funcionado bastante bien —como demuestra la condición de octavo máximo goleador de Asobal con una media de 27’6 tantos por encuentro—con el principal problema de las pérdidas de balón que sufríamos al principio y que ya solucionamos», apunta Dzokic.
Trabajo duro
La fórmula que ha servido para llevar a los rojiblancos hasta el final de la primera vuelta en su mejor momento ha sido «el trabajo duro que empezamos en agosto». Por este motivo, el serbio señala que «debemos afrontar la segunda mitad del campeonato con la misma mentalidad que empezamos la pretemporada».
Antes de las vacaciones, varios miembros del equipo rojiblanco acudieron ayer al Hospital de Sagunto para cumplir con la tradicional cita que les lleva a repartir obsequios y regalos entre los niños ingresados.
Por otra parte, la directiva encabezada por Juanjo Bataller ha convocado para el próximo 14 de enero en el centro cívico una doble asamblea que tendrán carácter ordinario y extraordinario. En el primero de los casos, se tratará el balance deportivo y de cuentas de la pasada temporada, así como las previsiones para la presente, mientras que en el segundo se iniciará el proceso de renovación de la junta directiva al que tiene que someterse el equipo de Juanjo Bataller. La intención del presidente es volver a presentarse con algún pequeño cambio en el resto del organigrama.
La preocupación se centra en el aspecto económico
El optimismo con el que se vislumbra el porvenir deportivo contrasta con las dudas económicas que rodean al Alser BM Puerto. Después de decidir con el apoyo de los socios que el club jugaría en Asobal pese a no tener garantizado el presupuesto de ingresos de la temporada, los rojiblancos han llegado al ecuador del campeonato con la necesidad de recabar 150.000 euros más que les permitan responder a sus compromisos a partir de marzo.
En este sentido, la directiva encabezada por Juanjo Bataller no esperaba recibir una negativa por parte de la Diputación de Valencia a la solicitud de ayuda para este 2010. La petición fuera de plazo y la escasez de recursos fueron los argumentos esgrimidos por el diputado de Deportes, Miguel Bailach, para justificar la desaparición de la ayuda de poco más de 8.000 euros que recibió el Alser en 2009.
El popular sólo se comprometió a tener en cuenta la solicitud de ayuda de cara a los presupuestos provinciales de 2011 que se están elaborando. Mientras y con urgencias por no llegar «asfixiados» económicamente a final de temporada para poder hacer un equipo en Asobal, el Alser todavía confía en que la Diputación muestre cierto compromiso con el proyecto rojiblanco o aparezca otra fuente de financiación de origen estatal.
