Una de las jugadas de estrategia que tuvo el Saguntino
El Saguntino dio un jarro de agua fría a sus aficionados con el mal partido disputado en casa frente el Torrellano (0-1). Los rojillos se presentaban en el Camp Nou de Morvedre tras dos buenos partidos, pero ante los alicantinos se mostraron incapaces de generar fútbol ofensivo.
De hecho, su ocasión más clara fue en el primeros compases en una jugada de estrategia, ya que el partido casi siempre se disputó al ritmo que más le interesaba a los visitantes. Éstos tuvieron suficiente con imponer su mayor presencia física y sus escasos chispazos atacantes para llevarse los tres puntos.
Dos buenas oportunidades tuvo el Torrellano para adelantarse en la primera mitad, cuando los rojillos se acercaron a su peor versión de la temporada. El centro del campo apenas aparecía y sólo se salvaban la entrega de Cristian y alguna jugada individual de Raul García.
El comienzo de la segunda parte vieron los mejores minutos saguntinistas, que incorporaron a Raul Sáez a la delantera devolviendo a Pablo Agudo a la medular. El juego con más ritmo de balón y más cercano al rival en la presión fue sólo un espejismo, ya que el partido volvió pronto donde querían los visitantes.
De este modo, Álvaro dio un primer aviso serio a los 20 minutos, pero fue 5 después cuando aprovechó una rápida jugada por la izquierda de un compañero para rematar a la red sin que Toni Gómez pudiera hacer nada para evitarlo.
Mientras los locales apenas se acercaban con peligro en jugadas aisladas, el encuentro acabó de decantarse en el minuto 79, cuando Raul García vio la tarjeta roja ahogando cualquier opción para la reacción rojilla.
Esta derrota manda nuevamente a los hombres de Dani Ponz a las zonas de descenso, antes de repetir el próximo sábado en casa cuando reciban al colista Villajoyosa en la penúltima jornada de la primera vuelta en el grupo VI de tercera división.
