Marco Barba demostró en el trazado británico de Brands Hatch el grado de madurez que ha alcanzado como piloto. En un circuito nuevo para él, el saguntino iniciaba la segunda mitad de la European F3 Open desde el liderato, que conservó frente a su máximo rival, el local Macleod.
Un gran ritmo le fue distanciando de sus rivales y esta diferencia no estuvo amenaza ni con la entrada del safety car en la cuarta vuelta al cruzar la línea de meta con 7 segundos de margen sobre su perseguidor.
En la segunda prueba y desde la sexta posición en la parrilla, el saguntino pudo recuperar dos posiciones, una en la salida y otra en carrera, para acabar en cuarta plaza justo por detrás de Macleod ante el que prefirió no arriesgarse con un intento de adelantamiento al rodar parejos.