De hecho el gobierno de Alfredo Castelló ha empezado a mostrar su debilidad incluso antes del inicio de la sesión, puesto que decidió retirar los puntos cuatro y nueve del orden del día, los referidos, precisamente, a la toma en conspiración de los Estatutos del Patronato Municipal de Deportes y el referido a la remodelación del servicio de la grúa municipal, dos puntos que habían levantado en armas a los trabajadores municipales, y que se habían intentado en vano pactar con SP. Un claro anticipo de lo que iba a pasar.
El Ayuntamiento no se hará cargo del mantenimiento de las playas
El primer varapalo para el gobierno fue el rechazo a renovar el convenio con la Agencia Valenciana de Turismo por el que el Ayuntamiento se hace cargo de las labores de mantenimiento de las instalaciones de las playas a cambio de, con posterioridad, recibir un dinero del ayuntamiento.
A pesar de la defensa realizada por la actual delegada de playas, Leonor Murciano, quien hereda el convenio de la anterior encargada del área la segregacionista Lidia Sánchez, que llegó a vincular las certificaciones de calidad que han recibido las playas de la ciudad con este convenio, el plan fue considerado, casi por unanimidad de los grupos como«ruinoso» para el municipio. La edil nacionalista Teresa García señaló que el convenio del año pasado supuso una transferencia por parte de la Generalitat al Ayuntamiento de 56.000 euros pero un gasto real cercano a los 80.000, un auténtico despilfarro en opinión de García que se dispararía este año que la Agencia Valenciana de Turismo proponer reducir su aportación hasta los 12.000 euros. «Nos proponen asumir las competencias de otros y pagar por ello, ¿que sentido tiene? lo que está haciendo el PP es repartir el déficit de la Generalitat entre los ayuntamientos» apostilló García.
Murciano intentó defender el convenio argumentando que el año pasado fue deficitario porque el consistorio invirtió en muchas mejoras, pasarelas, instalación de canalizaciones, que este año no sólo no se tendrían que hacer, y que además este año no habría que hacerse cargo de las instalaciones de las duchas, algo que fue desmontado por el portavoz socialista José Luis Chover, quien le señaló que el texto del convenio era idéntico, coma por coma, del anterior, con la única modificación de la cuantía económica a recibir.
Informe de Juan Serrano
Paradójicamente uno de los momentos más tensos para el PP lo vivió en uno de los puntos en los que se previa menos resistencia por parte de la oposición, la decisión de desviar 200.000 euros de las partidas del Consell Agrari y el Departamento de Mantenimiento, para sufragar así la ayuda que el Ayuntamiento prestará al Club Balonmano Puerto, equipo que ha conseguido este año el ascenso a la liga Asobal, un logro que peligraba a casa de la crisis económica y que se solventará gracias a esta ayuda del Ayuntamiento.
Sin embargo al principio del debate el edil nacionalista Quico Fernández, ha preguntado porque no sólo no existía un acuerdo del consejo rector del Consell Agrari dando el visto bueno a la operación, sino que el informe del edil Juan Serrano en el que se aseguraba que la reducción del presupuesto en 100.000 en dos de sus delegaciones no afectaría al funcionamiento de las mismas se encuentra sin firmar. En ese momento Serrano ha asegurado que era la primera vez que veía ese informe con su nombre y que, por lo tanto, ni lo había firmado, ni lo había tratado en el consejo rector, confesión que ha despertado no poco sorpresa entre los ediles de oposición.
Aún así la modificación presupuestaria de las dos delegaciones ha salido adelante con los votos de PP, SP y Grupo Mixto, mientras que la concesión de la ayuda a Club Balonmano Puerto ha sido aprobada por unanimidad. Aunque eso sí desde Esquerra Unida se ha pedido que la ayuda no se gaste en fichajes, sólo en el aval que hay que pagar a la liga Asobal, y desde el Bloc se ha lamentado que los 200.000 euros se sufraguen con dos reducciones tan importantes de crédito, y no repartiendo el coste en pequeños recortes a diferentes concejalías.
