Acció Ecologista-Agró ha exigido a la Autoridad Portuaria de Valencia que paralice el proyecto de ampliar el Proyecto de Ampliación del Puerto de Sagunto. Agró, que afirma haber tomado la decisión tras analizar el Estudio de Impacto Ambiental del citado proyecto. Agró asegura que hace esta petición «por la escasa viabilidad económica de esta nueva ampliación del puerto y, especialmente, la ausencia de medidas concretas para corregir el grave impacto que este proyecto tendrá sobre el espacio protegido de la Marjal dels Moros, y sobre las escasas praderas de posidonia que sobreviven en la costa saguntina».
Los ecologistas consideran inaceptable que con «la grave crisis que estamos sufriendo, nuestros gobernantes continúan empeñados en derrochar el dinero público por tierra, mar y aire con infraestructuras de escasa viabilidad económica y de nula rentabilidad social. Al aeropuerto sin aviones de Castelló o el AVE en Teruel, ahora hay que sumar el proyecto de ampliación del Puerto de Sagunto. Esta propuesta de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) llega en un contexto económico muy delicado, que hace presagiar su fracaso por la actual reducción del tránsito de mercancías marítimas, pero también por la infrautilización del resto de puertos valencianos, como es el caso del de Castelló o el de la propia Valencia».
A los interrogantes económicos que, en su opinión, arroja el proyecto los ecologistas añaden, como no podía ser de otra manera, serias dudas medioambientales, «que el Estudio de Impacto Ambiental de la Ampliación del Puerto de Sagunto deja sin respuesta» según se afirma desde Agró. Para los ecologistas este proyecto condicionará «todavía más» el futuro de la Marjal de los Moros, un espacio natural catalogado como Zona de Especial Protección para Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC), y que forma parte de la Red Natura 2000.
Los miembros de Agró consideran que las medidas correctoras propuestas en el Estudio Acústico Predictivo «resultan insuficientes, tanto en la zona residencial del Grao Vell como en la propia Marjal dels Moros». También encuentran pegas,«por insuficientes y nada concretas», las propuestas para corregir el impacto paisajístico que este proyecto tendrá en la zona arqueológica del Grao Vell, en la Marjal dels Moros y en la «práctica totalidad» de la costa de Sagunto. «Esta carencia de concreción en las medidas se da también en otros casos, como por ejemplo en la modificación del trazado de Cañada Real de la Vereda de la Mar. Por el que respeta a otros impactos, como el lumínico, la situación todavía es peor, puesto que el Estudio del APV ni lo contempla y, por lo tanto, no propone ninguna medida correctora» aseguran desde Agró.
Los ecologistas también denuncian «graves errores» en la cartografía bionómica del Estudio de Impacto Ambiental del APV, que«imposibilitan evaluar correctamente los daños que puede provocar este proyecto en el medio marino. Entre estos impactos hay que destacar la desaparición de las escasas praderas de Posidonia oceánica que sobreviven en la costa saguntina, y que serán sepultadas con la construcción de la nueva dársena norte del Puerto de Sagunto. Cómo pasa con el caso de la contaminación lumínica, el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto no contempla ninguna medida correctora o compensatoria por la pérdida de las praderas de posidonia».
Desde la organización ecologista se espera que «las administraciones competentes recuperan la cordura y paran este nuevo disparate que, además de implicar un gasto injustificable en el actual contexto de recortes sociales, comporta una serie de impactos inasumibles para una zona tan valiosa como la Marjal delss Moros y para una costa tan castigada como la de Sagunto».
Los ecologistas consideran inaceptable que con «la grave crisis que estamos sufriendo, nuestros gobernantes continúan empeñados en derrochar el dinero público por tierra, mar y aire con infraestructuras de escasa viabilidad económica y de nula rentabilidad social. Al aeropuerto sin aviones de Castelló o el AVE en Teruel, ahora hay que sumar el proyecto de ampliación del Puerto de Sagunto. Esta propuesta de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) llega en un contexto económico muy delicado, que hace presagiar su fracaso por la actual reducción del tránsito de mercancías marítimas, pero también por la infrautilización del resto de puertos valencianos, como es el caso del de Castelló o el de la propia Valencia».
A los interrogantes económicos que, en su opinión, arroja el proyecto los ecologistas añaden, como no podía ser de otra manera, serias dudas medioambientales, «que el Estudio de Impacto Ambiental de la Ampliación del Puerto de Sagunto deja sin respuesta» según se afirma desde Agró. Para los ecologistas este proyecto condicionará «todavía más» el futuro de la Marjal de los Moros, un espacio natural catalogado como Zona de Especial Protección para Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC), y que forma parte de la Red Natura 2000.
Los miembros de Agró consideran que las medidas correctoras propuestas en el Estudio Acústico Predictivo «resultan insuficientes, tanto en la zona residencial del Grao Vell como en la propia Marjal dels Moros». También encuentran pegas,«por insuficientes y nada concretas», las propuestas para corregir el impacto paisajístico que este proyecto tendrá en la zona arqueológica del Grao Vell, en la Marjal dels Moros y en la «práctica totalidad» de la costa de Sagunto. «Esta carencia de concreción en las medidas se da también en otros casos, como por ejemplo en la modificación del trazado de Cañada Real de la Vereda de la Mar. Por el que respeta a otros impactos, como el lumínico, la situación todavía es peor, puesto que el Estudio del APV ni lo contempla y, por lo tanto, no propone ninguna medida correctora» aseguran desde Agró.
Los ecologistas también denuncian «graves errores» en la cartografía bionómica del Estudio de Impacto Ambiental del APV, que«imposibilitan evaluar correctamente los daños que puede provocar este proyecto en el medio marino. Entre estos impactos hay que destacar la desaparición de las escasas praderas de Posidonia oceánica que sobreviven en la costa saguntina, y que serán sepultadas con la construcción de la nueva dársena norte del Puerto de Sagunto. Cómo pasa con el caso de la contaminación lumínica, el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto no contempla ninguna medida correctora o compensatoria por la pérdida de las praderas de posidonia».
Desde la organización ecologista se espera que «las administraciones competentes recuperan la cordura y paran este nuevo disparate que, además de implicar un gasto injustificable en el actual contexto de recortes sociales, comporta una serie de impactos inasumibles para una zona tan valiosa como la Marjal delss Moros y para una costa tan castigada como la de Sagunto».
