El pasado fin de semana se celebró el X Torneo Internacional Villa de Avilés Copa España en el que participaron más de 900 judokas distribuidos en 120 equipos procedentes de Francia, Portugal, Rumanía o Argentina.
Con un alto nivel, el Gran Maluc de Canet d'En Berenguer acudía con cinco deportistas en tres categorías, entre los que el primero en saltar al tatami fue el cadete Carlos Requena. Sólo un vasco le separó de la final, ya que el resto del torneo se saldó con claras victorias que le llevaron a colgarse la medalla de bronce.
Todavía el sábado, el junior Francisco Sarió no tuvo suerte en el cruce de menos de 73 kilogramos y se enfrentó a un rocoso judoka portugués al que no pudo batir quedándose apeado pronto de la lucha por las medallas.
En la segunda jornada fue el turno de los infantiles, entre los que Esther Sarió obtuvo la plata, situándose en el segundo puesto del ranking nacional, sólo por detrás de la campeona de España. Adrián de Nalda, mientras, consiguió el bronce después de que un fallo le privara del oro.
Para completar la representación del Gran Maluc, Pablo Blánquez se quedó fuera del podio tras perder el combate por el tercer puesto a falta de 30 segundos. Estos resultados "nos hacen estar orgullosos por el trabajo, pero somos ambiciosos y en las próximas Copas de España, previstas para el 6 y el 13 de noviembre, seguiremos luchando por ser los mejores", apuntan desde la entidad.
Por otra parte, los más pequeños del Gran Maluc participaron en Picassent en el ranking provincial, donde obtuvieron un botín de siete medallas, gracias al oro de Sergio Tortajada, las platas de Carlos Blánquez e Ismael González, así como los bronces de Arturo Burgalés, Pablo Guijarro, Jordi Gualda y Alejandro Burgalés.