El Acero sigue desafiando a la lógica. La última muesca en su espectacular temporada fue el Novelda, que cayó en el Fornás (4-1) ante unos rojiblancos que no echaron de menos a Oliva, aquejado de problemas musculares que le dejaron en el banquillo.
El encuentro, que supuso la quinta victoria consecutiva y la octava en nueve partidos para los hombres de Dani García, comenzó de manera inmejorable para los locales, que se adelantaron a los 2 minutos por medio de Noé al remachar una dejada de Gámez a centro de Richi Moreno.
Mientras los alicantinos inquietaban a balón parado, los porteños presionaban arriba con ahínco y así llegó el segundo, después de que Gámez robara un balón que Noé resolvió muy bien en el mano a mano.
Con algún acercamiento peligroso de los visitantes, el Acero cerró el partido en la segunda parte, gracias a su solidez en centro del campo y defensa, así como al tercer tanto, que esta vez anotó Richi Moreno al plantarse solo delante del portero y regatearle.
Cierta relajación abrió la puerta a la reacción del Novelda, que redujo diferencias a la salida de un corner. Sin embargo, los rojiblancos no estaban dispuestos a ceder más terreno y acabaron metiendo el cuarto que les permite seguir en los puestos de promoción de ascenso a segunda división B.
