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Sesenta años de lucha grecorromana y libre olímpica en la localidad se condensarán mañana durante la celebración del aniversario del Lluita Morvedre, que antes fue el Club de Lucha Puerto de Sagunto y el Polideportivo Olímpico. La entidad, que ahora preside Juan Carlos Morte y José Aspas fundó a mediados del siglo pasado, organiza una jornada llena de competición y homenajes, que servirá para reunir a algunos de los hombres que han convertido a la capital del Camp de Morvedre en referencia de la lucha en el ámbito autonómico y nacional.     

Muchos son esos nombres que han hecho grande este deporte y entre los elegidos se encuentra Arturo González, que fue partícipe de la fundación del club y todavía mantiene relación con su gran pasión que es la lucha. «Después de que José Aspas se marchara a Venezuela, nos quedamos sin nada. Sin embargo, fuimos capaces de ahorrar durante un año de la paga que nos daban nuestros padres para comprar una lona», recuerda.

Otros momentos imborrables en su memoria son «los golpes que me daba el corazón cuando llamé a la puerta del gimnasio para practicar lucha», la participación olímpica como entrenador en Barcelona 92 o la visita sorpresa de «una princesa japonesa, que quiso ver las instalaciones en las que entrenábamos». Entre los luchadores que dejaron huella en la historia del deporte local, Arturo González apunta a Ángel Serna, Mariano Dolz, Agustín Aja, Rafael Melgoso, Ricardo Fernández y una lista «muy grande», que llega hasta Andrés Iniesta con su participación olímpica en 1992 o Richard Gil en la actualidad.

Sobre este presente de la lucha en la localidad, González apunta que «va bien. Hay dos clubs y eso no tiene porqué ser malo, porque demuestra vitalidad». En lo que no está de acuerdo es en los cambios en el reglamento: «La lucha ha perdido vistosidad, porque la grecorromana era muy técnica y con una gran variedad de acciones, pero, contra la lógica, se ha ido limitando y cada vez se pueden emplear menos recursos para superar al rival», lamenta.