Patxi Peg fue el único que aguantó el tipo en Torrevieja, donde el Alser encajó la quinta derrota de la temporada en Asobal (34-22), la primera ante un rival de su liga, con una imagen lamentable en la que se salvó el capitán y poco más.
El otro gran protagonista porteño del derbi autonómico fue la afición, que estuvo representada en el pabellón Cecilio Gallego por decenas de personas. Los ánimos de la sección más bulliciosa no cesaron en todo el encuentro, aunque también se escucharon cánticos recriminatorios a jugadores y entrenador.
En cuanto al resto, el partido tuvo poca historia. La defensa alicantina y especialmente su portería fueron insuperables para el Alser, que falló mucho desde los 6 metros. Esos errores y el horrible repliegue rojiblanco dieron muchas facilidades al Torrevieja, que contaba con Jorge Sánchez como estilete.
Novelle y Cuartero también se unieron al festival local, que apenas tuvo que superar un pequeño arreón porteño que se acabó cuando Pejanovic paró otro lanzamiento desde los 6 metros que hubiera pùesto al Alser a 4 goles en la segunda mitad.
Con las fuerzas justas por las bajas de Nebot, Stefanovic y Dzokic, además de la poca participación de Muiña, el final del encuentro resultó sonrojante, ya que el Torrevieja sacó provecho del caos visitante para certificar su triunfo y asegurar el gol average con su rival autonómico.
Por el Alser salieron de inicio Peg, Sorrentino (3), Moya (2), Sifre (5, 3p), Tarrasó (3), Prendes (2) y Fernández (2). También jugaron Rubén Ruiz (2), Chelu Cid (3), Muiña y Moya de Saz.
Parciales cada 5 minutos: 1-0, 4-3, 7-5, 11-7, 14-8, 16-10 (descanso), 18-11, 20-13, 22-15, 24-17, 27-20 y 34-22.
