La festividad de Todos los Santos se celebra a nivel internacional, el día 1 de noviembre, en aquellos países con tradición católica. Esta celebración fue creada por la Iglesia, según se conoce, en el siglo X, para compensar la falta de algún santoral dentro del calendario anual. Otras iglesias que lo festejan son la Anglicana, Ortodoxa y Luterana.
Por su parte, el Ayuntamiento de Sagunto, como viene haciendo desde 2007, ha puesto en marcha un servicio gratuito de autobuses para atender la elevada demanda de visitantes que se produce durante esta fiesta en ambos camposantos, así, los ciudadanos puedan visitar a sus seres queridos desde las 9 de la mañana y hasta las 18 horas, teniendo una frecuencia de 30 minutos. Las salidas del bus se inician y concluyen en el asilo a las horas y las medias, mientras que en el Puerto de Sagunto se inician también desde y hasta el cementerio a las horas y las medias.
Como no podía ser de otra manera, la crisis también se está dejando sentir en esta tradición. Según han confirmado a este diario digital propietarios de algunas floristerías han señalado que los familiares gastan menos dinero que en tiempos de bonanza económica, sobre todo en el producto de flores frescas. «En lugar de adquirir un ramo con varios tipos de flores, optan por algo más sencillo». No obstante, la costumbre se mantiene latente, como hemos podido comprobar en el cementerio municipal del Puerto.
No obstante hay que señalar que si en el cementerio del Puerto hay más de 8.000 nichos y menos de la mitad en el de Sagunto, no hay duda, que todos los establecimientos que se dedican a la ornamentación de Todos los Santos han hecho «su agosto», aunque desde algunos establecimientos maticen que la gente ha invertido menos que en años anteriores, sin embargo, es probable que el montante de los que los familiares hayan gastado en adornar la tumbas de sus difuntos se aproxime a los 300.000 euros, sacando la media de los diversos precios de los ramos y adornos de flor artificial. Sin contar el coste municipal en adornar los cementerios para estos días.
Pero como también comentan algunas personas que han colocado ramos a sus difuntos, «me he gastado 50 euros en flores, pero también me gasto a veces ese dinero en otras cosas superfluas», o «mientras viva seguiré trayendo flores».
