Dolors Carrasquilla, la vecina de Puerto de Sagunto que se encuentra encadenada desde casi un mes frente a las puertas del Palau de la Generalitat Valenciana, ha participado hoy en el acto de entrega de firmas, junto con un representante de la Coordinadora por la Discapacidad y la Dependencia, para la derogación del copago farmacéutico. Así pues, se han entregado más de 20.900 rúbricas que se han ido recogiendo durante estos últimos días en el campamento donde vive esta mujer dependiente.
Precisamente esta era una de las reivindicaciones por las que Carrasquilla se encadenó y comenzó una huelga de hambre, además de por su situación personal al negarle una gran invalidez pese a tener una enfermedad degenerativa de los huesos de las extremidades conocida como osteomielitits. Finalmente, la vecina de Puerto de Sagunto decidió dejar la huelga de hambre después de que, el pasado miércoles, el Conseller de Sanidad, Manuel Llombart, y su homónima de Servicios Sociales, Asunción Zaplana, adquirieran un compromiso público para solucionar o compensar este copago para los discapacitados.
«Los compromisos públicos del gobierno valenciano y el gesto de buena voluntad de Dolors son claros; solo esperamos que los hechos de los próximos días también lo sean, de lo contrario la indignación e injusticia social tendrá consecuencias terribles, de las que solo pueden esperar por nuestra parte acciones ciudadanas de un nivel de contundencia más elevado. De hecho el campamento en la Plaza de la Virgen, como medida de presión, se mantiene y la lucha continua para velar por el cumplimiento de los compromisos adquiridos», explicó Javier Hernández Padilla, portavoz del Grupo de Apoyo a Loly.
A pesar de esto, Carrasquilla presentará en los próximos días un recurso jurisdiccional ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) para reclamar su derecho de gran invalidez, reconocido anteriormente en 2009 por este mismo organismo de Lleida y que le fue arrebatado sin mejoría en su enfermedad crónica y degenerativa con informes médicos favorables a su favor, con 27 operaciones realizadas y ocho más solo en 2012. «He dejado la huelga de hambre porque he visto voluntad por parte de los consellers pero si, en un tiempo prudencial, esto no se soluciona, pienso dar de nuevo guerra, pero que mucha guerra», apuntó la vecina de Puerto de Sagunto.
