La crueldad se vuelve a cebar con los animales. Como ha ido informando este rotativo en numerosas ocasiones, una vez más, el envenenamiento de perros se ha convertido en el causante de la muerte de varios animales en la última semana. En concreto, y como han denunciado ante El Económico varios propietarios, el Triángulo Umbral y el pipi- can del barrio Wichita han sido los escenarios donde, junto a la zona de Churruca, y Tres de Abril, se han producido estos sucesos.
J.L.M explica que «en menos de dos meses ya he perdido la cuenta de los perros que han sido envenenados. He llamado a la policía y me ha dicho que he de hacer una instancia en el Ayuntamiento de Sagunto para poder denunciar, por lo que pido la ayuda de todo el mundo. Esta última semana ya son tres los casos que conozco de perros envenenados en estas zonas. Da terror salir a la calle con ellos».
Para ello, esta amante de los animales ha redactado un documento que ha ido dejando en los distintos veterinarios y establecimientos de la ciudad para que la gente lo pueda firmar con el objetivo de que aumente la vigilancia policial de modo que se vele por los derechos de los animales y se pueda atrapar a los responsables de dichos actos. «Con el ruido de una persona no se consigue casi nada, pero si somos muchos, podremos hacerlo. Sólo hay que poner el nombre, el DNI y firmar. Alcemos todos la voz para que acabe este sufrimiento», escribe otra afectada en un grupo de redes sociales de la ciudad.
La misma fuente explica que «hay una persona que se dedica a poner comida envenenada en el Triángulo Umbral y en el pipi-can que hay en la zona de Wichita, el la Zona Tres de Abril y que ya ha matado a muchos perros. Esto no se puede permitir, tenemos que pararlo», denuncia.
Un grupo de afectados y gente que empatiza con ellos están ornamentando la ciudad con papeles en los que se avisa de lo que está sucediendo con los perros. «Basta ya. Cada semana muere un perro por envenenamiento en nuestro pueblo, sobre todo en el Triángulo Umbral, C/Churruca, Sup IV y Tres de Abril. Hoy es un perro, pero mañana puede ser un niño», se puede leer en ellos. Además, se pide la colaboración ciudadana ante gente «sospechosa» que deje comida en zonas muy frecuentadas por animales.
Acudir al pleno es otra de las opciones que tiene en mente un grupo con decenas de afectados y propietarios de perros que se solidarizan con aquellos que han perdido sus mascotas por culpa de esta mano negra.
Además, organizados por la red, los mismos tienen previsto reunirse para plantear una línea de actuación y comenzar tomar medidas al respecto. Asistencia a plenos, turnos de vigilancia y grabaciones en las zonas donde han muerto ya varios perros, son algunas de las ideas que pueden leerse para poder descubrir a la persona que envenena a los animales acabando con sus vidas.
Unos esfuerzos que están dispuestos a realizar para mantener a salvo a sus fieles amigos pero que, como reconocen, no valdrá para mucho si, afirman, las leyes no cambian. E. P, vecino de Puerto de Sagunto afirma con tristeza que «aunque consiguiéramos cogerlos con las manos en la masa, nosotros o la policía, a las dos horas quedarían en libertad con cargos y el día de la vista les caería una pena de multa, 200 euros para indemnizar y la prohibición de tener animales o comercializar con ellos durante el tiempo de la condena. Nada más. Así de triste, así de injusto», se queja.
Al cierre de esta edición moría otro perro envenanado tras pasear por el Triángulo Unbral la tarde del jueves, por lo que han sido cuatro, según ha podido conocer este medio, los casos de perros envenenados y muertos esta semana.
