La Publicación «El Informativo del Ayuntamiento» correspondiente al mes de marzo, que edita la sección sindical de CCOO del consistorio saguntino, publica en su portada una información titulada: «Descomposición de la Política de Personal». En la que señalan al Equipo de Gobierno como el que propicia «la descomposición, posiblemente interesada», de la política de recursos humanos del Ayuntamiento, «pese a la voluntad del Delegado de Personal». Los editores apuntan que tras el año y medio de de la toma de posesión de sus cargos, los gobernantes municipales están «deteriorando a pasos agigantados la gestión de personal, ya que si vuelve a ser un escándalo gran parte de las productividades que se están concediendo, las previsiones de futuro no son más halagüeñas».
Esas previsiones de futuro del equipo de gobierno que dirige Francesc Fernández pretenden crear una macroestructura, al frente de la cual quieren que haya una Súper Jefatura de Área, «y ya tienen pensado la persona que lo va a ocupar».
Añaden desde la sección sindical que dicha Área estaría compuesta por un Servicio de Disciplina Urbanística (con su flamante Jefe de Servicio) del que depende las secciones de Disciplina, Patrimonio Histórico-Industrial. Una Sección de Planeamiento, otra de Patrimonio y otra de Contratación. Y desde CCOO sospechan que a parte de contentar alguno que otro, al crear nuevos puestos también podrían «regularizar contratos temporales de carácter finalista, al margen de las bolsas de trabajo temporal».
La información que sigue está en clave interna y contiene un párrafo que literalmente dice: «Se ha “batido” una comisión de “salvadores” que desembarcarían en Deportes para “sanear” ese departamento, hacer propuestas de mejora, y quién sabe si facilitar privatizaciones, porque hay que tener en cuenta que en nuestra Comunidad solo el Ayuntamiento de Sagunto gestiona directamente el 100% de los servicios deportivos». Pero según los miembro de la sección sindical, lo que está detrás es el «reparto de una cuantiosa cantidad económica, más de veinte mil euros, a esos salvadores. Intuimos la mano que maneja esa batidora, ¿o es la batidora quien maneja la mano?».
Añaden que todo esto que está generando «los recelos que alguna que otra figura clave en todas estas actividades y, claro le contentan diciéndole “tranquilo que te podemos crear otra macro área” y así frenan ciertos movimientos desde las alturas». Para CCOO con esta situación lo que están forjando es la desmotivación y descontento generalizado en todo el personal del ayuntamiento «y que evidentemente generará consecuencias».
Una deuda desde 2014
En la misma publicación, se hace referencia a otros temas que afectan a los trabajadores, como los 300.000 euros que el ayuntamiento adeuda al persona desde 2014, destinados «para el ajuste del complemento específico acrecentándolo en 30 euros al mes a todo el personal; ello suponía entonces 218.400 euros. Además los 81.600 euros restantes, debía ser objeto de prorrateo proporcional para todo el personal del consistorio, con arreglo a su grupo de titulación, tomando como referencia las sucesivas reducciones entre el año 2009 y 2012 que experimentaron para cada uno de ellos». En otro artículo la sección sindical sigue reclamando un nuevo Catálogo de los Puestos de Trabajo, porque el existente data del siglo pasado
«Uno de los nuestros»
Es el título de otro artículo del boletín sindical, en que recuerdan que a finales del año pasado, la anterior concejala de Policía, «con buena idea y criterio, hizo todo lo posible para crear una sección especializada en violencia de género (VIOGEN) compuesta por un mando y dos (o cuatro) agentes». También se comprometió a que hubiera una partida en los presupuestos para adquirir chalecos antibalas. A primeros de año, esta edil dejó el cargo y lo asumió directamente el alcalde.
«Han pasado dos meses y el alcalde ni se ha pasado por la Central de la Policía Local», afirman desde CCOO y destacan, que ya nadie ha hablado de la Sección de VIOGEN tan «trascendental e importante para la ciudadanía (especialmente para las mujeres que son las que sufren las consecuencias tan graves».
Los editores de la publicación reclaman los chalecos antibalas que dicen que están presupuestados. «Estamos en alerta 4 en todo el ámbito nacional, y nuestro jefe directo, el alcalde, parece que no se lo cree, vamos fatal».
También subrayan que la seguridad de los edificios públicos «deja mucho que desear, toda persona que quiere entrar puede hacerlo porque no se realiza ningún control. Los sindicalistas le dicen al alcalde que «no ponga excusas» de que no tiene tiempo o que va a delegar en otro concejal y le piden que solucione el problema de una vez «pero con cautela, paciencia, sin ira ni complejos.El diálogo que usted tanto pregona, es precisamente lo que menos pone en práctica. Y más aún si escucha lo que no le gusta».
