La nueva ordenanza de Terrazas que prepara el cuatripartito municipal ya ha suscitado la consiguiente alarma y crítica entre el colectivo de hosteleros de la ciudad a la que hay que sumar ahora la valoración que realizan desde las filas del Partido Popular.
Recuerdan desde el Grupo Municipal Popular que Compromís, Esquerra Unida y ADN Morvedre, anunciaron la puesta en marcha de una nueva ordenanza sobre terrazas que dejó sin efecto la que fue aprobada por este Gobierno: «nos encontramos nuevamente en la misma situación de descontento generalizado, con un documento, que pretenden aprobar de espaldas una vez más a los sectores implicados», señala el portavoz popular, Sergio Muniesa.
Aseguran desde las filas populares que «el despropósito y la improvisación continua y el equipo de gobierno de nuevo cuño local, tras la incorporación del PSOE, al tripartito se reitera en los mismos errores que hace un año les llevó a dejar sin efecto la aprobación inicial de una ordenanza. Todo esto no es más que un suma y sigue en el cúmulo de despropósitos que han jalonado toda esta actuación, que comenzó con la improvisación de querer aprobar a correprisa una ordenanza para aplacar las críticas de los hosteleros tras haber sido sancionados», señala Sergio Muniesa.
El portavoz popular, asimismo, recuerda que tras la última reunión realizada por los hosteleros, han dado paso a un posicionamiento que exige una nueva redacción que aúne todos los intereses y pone de manifiesto que esta ordenanza conduce a su desaparición, por ello el dirigente del Partido Popular afirma con rotundidad que: «no se trata de aprobar lo primero que se tiene a mano, porque no es la solución. Tras todo este tiempo solo se ha presentado un documento basado en las características de otra ciudad y que es mucho más restrictivo en derechos que la anterior ordenanza, sin el paso previo de haber trabajado de forma conjunta y de forma previa con las áreas afectadas, hosteleros, vecinos y resto de fuerzas políticas».
Finalizan señalan desde el Grupo Municipal Popular que «mucho nos tenemos que esta improvisación y prisa tenga más que ver con la idea que tienen recogida en el presupuesto 2017 que pretende recaudar de los hosteleros de la ciudad y vados, en una muestra desmedida de afán recaudatorio, más de 1.200.000 euros, cuando la liquidación del año anterior por esos mismos conceptos escasamente superó los 460.000 euros. Querían ingresar tres veces más, y eso es una barbaridad», concluye Muniesa.
