La Coordinadora Comarcal de Ampas ha alertado sobre lo que considera claros indicios de que el Ayuntamiento de Sagunto y la Conselleria de Educación, planean entregar la parcela del proyectado IES Número 5 a manos de alguna entidad educativa privada. De confirmarse estas sospechas se renunciaría, según los cálculos realizados por las AMPA, a un dotacional escolar de 33.000 metros cuadrados con un valor de mercado actual, que rondaría los 15 millones de euros.
Los miembros de la Coordinadora, que confirman así la denuncia hecha ayer desde el Bloc basan su acusación en los hechos acaecidos en la última sesión del Consejo Escolar Municipal en julio, la que cerró oficialmente el curso 2008, y en el que el Alcalde Alfredo Castelló anunció, por sorpresa, que el Secretario Autonómico de Educación iba a visitar ese día la Tenencia de Alcaldía y pedía que le acompañaran a la reunión dos padres y dos directores con la intención de que hicieran las preguntas que quisieran al alto cargo autonómico. Este hecho ya fue recibido por las AMPAs con algo de malestar, porque con la premura de la invitación se dejaba casi sin margen de maniobra al Consejo Escolar para preparar y participar en un encuentro, pero ese malestar se transformó en preocupación al conocer de boca del Secretario que el IES número 5 no se iba a construir.
Según el relato de los padres asistentes, el Alcalde Alfredo Castelló, tras conocerse esta noticia, y según destacan «como si se le acabara de ocurrir», que estaría dispuesto a aceptar cualquier formula que permitiera su construcción, algo que desde la Coordinara consideran una alusión obvia «a regalarle el suelo público (cederlo durante 80 años) a alguna entidad religiosa y/o privada», palabras textuales del comunicado del AMPA.
La Coordinadora Comarcal recuerda que la Conselleria de Educación «ya se ha gastado dinero de todos en la redacción de los proyectos básico y de ejecución del IES NÚMERO 5» que con 24 unidades de Eso y 8 de Bachiller, aparte de los Ciclos Formativos que pudiera albergar está llamado a ser uno de los centros de referencia de la ciudad, por lo que, aunque aseguran no tener «nada en contra de la iniciativa privada en la enseñanza», consideran que «hay mucho suelo en el Camp de Morvedre en el que invertir, en el que construir y con el que lucrarse» y no se puede permitir que «estos colegios no sea parasitarios del sistema público».
Desde la Coordinadora se considera que «los Centros de Iniciativa social», término en el que se agrupan los centros privados que se edifican en suelo público, «no están teniendo éxito en la Comunidad Valenciana, ya que el retorno de la inversión es más que dudoso si no se les cobra a las familias. En la actualidad, con esa fórmula se han construido escuelas infantiles (etapa educativa por la que, lamentablemente, no se ha apostado desde la administración pública) y la Universidad Católica San Vicente Mártir. De esta última entidad, conviene recordar que en Carcaixent se le regaló el suelo y un aulario que costó al Ayuntamiento 1’2 millones de euros. Al poco tiempo, esas instalaciones fueron abandonadas, porque a dicha universidad le resultaba más rentable centralizar sus servicios en Alzira. El negocio es el negocio. Nuestro Alcalde debería hacer cumplir a la Conselleria d’Educació el compromiso que esta adquirió para la construcción del IES NÚMERO 5. Le deseamos más fortuna que la que ha tenido con la Gerencia y el Campus educativo de las Artes Escénicas».
En su comunicado también se recuerda que el pleno del Ayuntamiento de Sagunto se pronunció en enero de este año contra la cesión de suelo público escolar a empresas privadas, moción socialista que respaldó el Bloc, Segregación Porteña e Izquierda Unida con el Voto en contra el PP.
Ante esta situación se pide un consejo escolar municipal extraordinario «para que se pueda estudiar como se merece la propuesta que realizó el Alcalde y el Secretario Autonómico de Educación».
La Coordinadora también reconoce que entre los asuntos que les explicó Rafael Carbonell se incluía «la buena noticia de que el parvulario de Villar Palasí, en barracones, y que hace cuatro años que se tenía que haber licitado, era una prioridad» y que «también mencionó el aula-comedor de Plaza Ibérica y la posibilidad de convertir el IES Eduardo Merello en un Centro Integrado de Formación Profesional».
Los miembros de la Coordinadora, que confirman así la denuncia hecha ayer desde el Bloc basan su acusación en los hechos acaecidos en la última sesión del Consejo Escolar Municipal en julio, la que cerró oficialmente el curso 2008, y en el que el Alcalde Alfredo Castelló anunció, por sorpresa, que el Secretario Autonómico de Educación iba a visitar ese día la Tenencia de Alcaldía y pedía que le acompañaran a la reunión dos padres y dos directores con la intención de que hicieran las preguntas que quisieran al alto cargo autonómico. Este hecho ya fue recibido por las AMPAs con algo de malestar, porque con la premura de la invitación se dejaba casi sin margen de maniobra al Consejo Escolar para preparar y participar en un encuentro, pero ese malestar se transformó en preocupación al conocer de boca del Secretario que el IES número 5 no se iba a construir.
Según el relato de los padres asistentes, el Alcalde Alfredo Castelló, tras conocerse esta noticia, y según destacan «como si se le acabara de ocurrir», que estaría dispuesto a aceptar cualquier formula que permitiera su construcción, algo que desde la Coordinara consideran una alusión obvia «a regalarle el suelo público (cederlo durante 80 años) a alguna entidad religiosa y/o privada», palabras textuales del comunicado del AMPA.
La Coordinadora Comarcal recuerda que la Conselleria de Educación «ya se ha gastado dinero de todos en la redacción de los proyectos básico y de ejecución del IES NÚMERO 5» que con 24 unidades de Eso y 8 de Bachiller, aparte de los Ciclos Formativos que pudiera albergar está llamado a ser uno de los centros de referencia de la ciudad, por lo que, aunque aseguran no tener «nada en contra de la iniciativa privada en la enseñanza», consideran que «hay mucho suelo en el Camp de Morvedre en el que invertir, en el que construir y con el que lucrarse» y no se puede permitir que «estos colegios no sea parasitarios del sistema público».
Desde la Coordinadora se considera que «los Centros de Iniciativa social», término en el que se agrupan los centros privados que se edifican en suelo público, «no están teniendo éxito en la Comunidad Valenciana, ya que el retorno de la inversión es más que dudoso si no se les cobra a las familias. En la actualidad, con esa fórmula se han construido escuelas infantiles (etapa educativa por la que, lamentablemente, no se ha apostado desde la administración pública) y la Universidad Católica San Vicente Mártir. De esta última entidad, conviene recordar que en Carcaixent se le regaló el suelo y un aulario que costó al Ayuntamiento 1’2 millones de euros. Al poco tiempo, esas instalaciones fueron abandonadas, porque a dicha universidad le resultaba más rentable centralizar sus servicios en Alzira. El negocio es el negocio. Nuestro Alcalde debería hacer cumplir a la Conselleria d’Educació el compromiso que esta adquirió para la construcción del IES NÚMERO 5. Le deseamos más fortuna que la que ha tenido con la Gerencia y el Campus educativo de las Artes Escénicas».
En su comunicado también se recuerda que el pleno del Ayuntamiento de Sagunto se pronunció en enero de este año contra la cesión de suelo público escolar a empresas privadas, moción socialista que respaldó el Bloc, Segregación Porteña e Izquierda Unida con el Voto en contra el PP.
Ante esta situación se pide un consejo escolar municipal extraordinario «para que se pueda estudiar como se merece la propuesta que realizó el Alcalde y el Secretario Autonómico de Educación».
La Coordinadora también reconoce que entre los asuntos que les explicó Rafael Carbonell se incluía «la buena noticia de que el parvulario de Villar Palasí, en barracones, y que hace cuatro años que se tenía que haber licitado, era una prioridad» y que «también mencionó el aula-comedor de Plaza Ibérica y la posibilidad de convertir el IES Eduardo Merello en un Centro Integrado de Formación Profesional».
