Los miembros de la Coordinadora de AMPAS del Camp de Morvedre han publicado en el manifiesto en el que cargan, duramente, contra los primeros cambios educativos realizados por el gobierno del PP. «Todas estas medidas “racionalizadoras” tienen un único objetivo cuantitativo: Reducir el gasto en educación a través de la reducción de grupos y por consiguiente de infraestructuras que no se llegarán a construir y de sueldos de maestros que no se van a contratar… ¡Y aún tienen el valor de decir que no se va a mermar la calidad de la enseñanza! Nuestros hijos e hijas no son mercancía susceptible de ser racionalizada por los recortes del gasto público en el ámbito educativo, consideramos que es de una ceguera política imperdonable (por las terribles consecuencias que va a tener) solucionar el problema del déficit público reduciendo la inversión en educación y decimos INVERSIÓN porque por cada euro que se invierte en educación el Estado recupera al menos 4 eurosen desarrollo, generación de empleo y generación de riqueza, por no hablar de los bienes culturales que estamos perdiendo» aseguran.
Para los miembros de la coodinadora comarcal estas medidas se traducirán en una peor calidad de la enseñanza y una reducción de las posibilidades reales de estudio para los alumnos del Camp de Morvedre, que tendrán cada vez más difícil acceder a los estudios que deseen. Para el AMPA estas medidas suponen «un total desprecio hacia muchas familias, hacia el profesorado y sobre todo hacia nuestros hijos e hijas en edad escolar que se van a ver afectados gravemente por un “Plan de equilibrio financiero de la Generalitat” para afrontar una crisis que ni han causado, ni tienen responsabilidad alguna».
Más croncretamente AMPA denuncia que el incremento de alumnos por aula supondrá que «en infantil y primaria se pase de 25 a 30 alumnos; en ESO de 30 a 36, en Bachillerato de 35 a 42, en FP de 30 a 36. Estas cifras podrían incluso verse incrementadas a 33, 39 y 46 respectivamente porque no se ha eliminado la posibilidad de incremento en caso de necesidad». Desde la asociación se denuncian que «el aumento de ratios supone masificar las aulas y degradar las condiciones de trabajo del profesorado «ya que habrá que atender a más alumnos con menos medios y recursos».
Los representantes de los padres consideran que esto pasará especial factura especialmente «a alumnos con dictamen, minusvalías o necesidades educativas especiales», además recuerdan que la mayoría de aulas y barracones «no están preparados para admitir número tan elevado de alumnos por clase»; «Los niños necesitan espacio vital para su proceso de aprendizaje y desarrollo, no son sardinas en latas. Esto, además puede conllevar también problemas de salud. Este problema lo vamos a vivir a corto plazo en nuestra comarca con la matriculación de alumnado de 3 años, 1º de la ESO y 1º de bachiller para el próximo curso, en ese momento podremos cuantificar la reducción real de grupos» añaden.
En cuanto a la supresión de Bachilleratos denuncian que, en su opinión, «puede provocar la reducción de la oferta pública de los mismos en nuestra localidad, dejando a nuestros jóvenes sin oferta formativa suficiente para elegir su itinerario formativo voluntario, es decir que tendrá que estudiar lo que haya y no lo que quiera o verse obligados a desplazarse a otras localidades donde pueda elegir su opción de bachillerato, con los consiguientes trastornos y esfuerzo económico de las familias afectadas. Todo ello condicionará posteriormente su elección de formación superior». Un problema que, según denuncian, se agrava con el aplazamiento en los nuevos módulos de FP «que va a suponer mayores dificultades para formarse y adecuarse al mercado laboral y por tanto para encontrar un empleo en un contexto de crisis económica como el actual» según las AMPAS.
El incremento de tasas universitarias, como no podía ser de otra manera, también ha sido criticado desde los AMPAS, al considerar que «la previsible restricción de las condiciones para obtener beca afectarán al acceso en condiciones de igualdad a los alumnos y alumnos de nuestra comarca».
La Coordinadora Comarcal de AMPA del Camp de Morvedre/ FAPA-Camp de Morvedre anuncia que va a iniciar una campaña informativa para asegurarse de que cada padre y cada madre tenga esta información y participe activamente del rechazo hacia estos recortes.
Para los miembros de la coodinadora comarcal estas medidas se traducirán en una peor calidad de la enseñanza y una reducción de las posibilidades reales de estudio para los alumnos del Camp de Morvedre, que tendrán cada vez más difícil acceder a los estudios que deseen. Para el AMPA estas medidas suponen «un total desprecio hacia muchas familias, hacia el profesorado y sobre todo hacia nuestros hijos e hijas en edad escolar que se van a ver afectados gravemente por un “Plan de equilibrio financiero de la Generalitat” para afrontar una crisis que ni han causado, ni tienen responsabilidad alguna».
Más croncretamente AMPA denuncia que el incremento de alumnos por aula supondrá que «en infantil y primaria se pase de 25 a 30 alumnos; en ESO de 30 a 36, en Bachillerato de 35 a 42, en FP de 30 a 36. Estas cifras podrían incluso verse incrementadas a 33, 39 y 46 respectivamente porque no se ha eliminado la posibilidad de incremento en caso de necesidad». Desde la asociación se denuncian que «el aumento de ratios supone masificar las aulas y degradar las condiciones de trabajo del profesorado «ya que habrá que atender a más alumnos con menos medios y recursos».
Los representantes de los padres consideran que esto pasará especial factura especialmente «a alumnos con dictamen, minusvalías o necesidades educativas especiales», además recuerdan que la mayoría de aulas y barracones «no están preparados para admitir número tan elevado de alumnos por clase»; «Los niños necesitan espacio vital para su proceso de aprendizaje y desarrollo, no son sardinas en latas. Esto, además puede conllevar también problemas de salud. Este problema lo vamos a vivir a corto plazo en nuestra comarca con la matriculación de alumnado de 3 años, 1º de la ESO y 1º de bachiller para el próximo curso, en ese momento podremos cuantificar la reducción real de grupos» añaden.
En cuanto a la supresión de Bachilleratos denuncian que, en su opinión, «puede provocar la reducción de la oferta pública de los mismos en nuestra localidad, dejando a nuestros jóvenes sin oferta formativa suficiente para elegir su itinerario formativo voluntario, es decir que tendrá que estudiar lo que haya y no lo que quiera o verse obligados a desplazarse a otras localidades donde pueda elegir su opción de bachillerato, con los consiguientes trastornos y esfuerzo económico de las familias afectadas. Todo ello condicionará posteriormente su elección de formación superior». Un problema que, según denuncian, se agrava con el aplazamiento en los nuevos módulos de FP «que va a suponer mayores dificultades para formarse y adecuarse al mercado laboral y por tanto para encontrar un empleo en un contexto de crisis económica como el actual» según las AMPAS.
El incremento de tasas universitarias, como no podía ser de otra manera, también ha sido criticado desde los AMPAS, al considerar que «la previsible restricción de las condiciones para obtener beca afectarán al acceso en condiciones de igualdad a los alumnos y alumnos de nuestra comarca».
La Coordinadora Comarcal de AMPA del Camp de Morvedre/ FAPA-Camp de Morvedre anuncia que va a iniciar una campaña informativa para asegurarse de que cada padre y cada madre tenga esta información y participe activamente del rechazo hacia estos recortes.
