El pasado viernes, la Asociación de Vecinos de Ciutat Vella de Sagunto, celebró su “III Taller del Proyecto de Barrio”, la finalidad del taller era reflexionar, analizar y tomar conciencia con los vecinos los diferentes cambios que están produciéndose en el barrio, y las soluciones que propone este Proyecto. Aprovechando la reunión también se trataron temas como la II Fase de Peatonalización, las obras de la calle Mayor y el mal funcionamiento de los bolardos de la calle Castell.
En esta sesión de participación abierta hubo una amplia corriente de opinión, según destacan los organizadores, que mostró la falta de confianza y utilidad que ha provocado entre los vecinos el mal funcionamiento del bolardos de la calle Castell. Según denuncian estos vecinos, la barrera de bolardos está sin funcionar desde el pasado 1 de Noviembre debido motivos técnicos y mecánicos, un problema al que los vecinos además añaden la falta de respuesta en el punto de auxilio o la precisión de la cámara instalada en esta zona.
Según sostienen los vecinos, el concejal de movilidad José Luís Martí les ha asegurado que «los problemas mecánicos se solucionarán al mes de diciembre, mientras que los ajustes técnicos se espera que finalicen en enero». En el comunicado también se asegura que Martí habló de que ha habido problemas mecánicos por culpa de «varios accidentes que ha soportado el bolardo»; pero las explicaciones no acabaron de convencer a algunos vecinos que resaltaron que el bolardo instalado era, literalmente, «un sistema de segunda» y alegaron que han tenido ya demasiada paciencia con un proyecto, la peatonalización del barrio, en el que empiezan a pensar que no cree el ayuntamiento.
Otras quejas recogidas por los vecinos fueron los trabajos que se están realizando en la zona de la Calle Mayor y a Penyetes . Los vecinos de la calle Mayor advirtieron del peligro que supondrá que no se reduzca el tráfico ahora que no habrán aceras a lo largo de la calle, pero más grave fueron las quejas sobre los acabados de las obras de la calle Mayor, sobre todo ante la falta de accesibilidad de los adoquines, los asistentes denunciaron que el tránsito por la calle en algunos punto es una tarea bastante difícil, y que ya se han dado caso de varios mayores que se han tropezado haciéndose, incluso, heridas a la cabeza. A raíz de estas observaciones la Asociación de Vecinos estudiará, junto a Discamp. qué soluciones se pueden proponer antes de que el Ayuntamiento ejecute la recepción de las obras.
En esta sesión de participación abierta hubo una amplia corriente de opinión, según destacan los organizadores, que mostró la falta de confianza y utilidad que ha provocado entre los vecinos el mal funcionamiento del bolardos de la calle Castell. Según denuncian estos vecinos, la barrera de bolardos está sin funcionar desde el pasado 1 de Noviembre debido motivos técnicos y mecánicos, un problema al que los vecinos además añaden la falta de respuesta en el punto de auxilio o la precisión de la cámara instalada en esta zona.
Según sostienen los vecinos, el concejal de movilidad José Luís Martí les ha asegurado que «los problemas mecánicos se solucionarán al mes de diciembre, mientras que los ajustes técnicos se espera que finalicen en enero». En el comunicado también se asegura que Martí habló de que ha habido problemas mecánicos por culpa de «varios accidentes que ha soportado el bolardo»; pero las explicaciones no acabaron de convencer a algunos vecinos que resaltaron que el bolardo instalado era, literalmente, «un sistema de segunda» y alegaron que han tenido ya demasiada paciencia con un proyecto, la peatonalización del barrio, en el que empiezan a pensar que no cree el ayuntamiento.
Otras quejas recogidas por los vecinos fueron los trabajos que se están realizando en la zona de la Calle Mayor y a Penyetes . Los vecinos de la calle Mayor advirtieron del peligro que supondrá que no se reduzca el tráfico ahora que no habrán aceras a lo largo de la calle, pero más grave fueron las quejas sobre los acabados de las obras de la calle Mayor, sobre todo ante la falta de accesibilidad de los adoquines, los asistentes denunciaron que el tránsito por la calle en algunos punto es una tarea bastante difícil, y que ya se han dado caso de varios mayores que se han tropezado haciéndose, incluso, heridas a la cabeza. A raíz de estas observaciones la Asociación de Vecinos estudiará, junto a Discamp. qué soluciones se pueden proponer antes de que el Ayuntamiento ejecute la recepción de las obras.
