Trabajadores denuncian haber ganado, tras descontar gastos de desplazamiento, 5 euros por jornadas de 10 horas

La entrada masiva de ETTs en la contratación de trabajadores agrícolas desploma los salarios en la comarca

 
La entrada masiva de ETTs en la contratación de trabajadores agrícolas desploma los salarios en la comarca La entrada masiva de ETTs en la contratación de trabajadores agrícolas desploma los salarios en la comarca
Viernes, 07 Marzo 2014 00:43

La crisis económica ha llevado a muchos ciudadanos de Camp de Morvedre a buscar trabajo en la recolección de cítricos en los campos de la comarca. Sin embargo, en demasiadas ocasiones, lo que han encontrado es una  estructura de negocio con salarios por debajo de lo que establece el convenio, condiciones laborales que cambian incluso una vez firmado el contrato, y una estructura de intermediarios y negocios paralelos en el que todo el mundo parece ganar dinero menos el trabajador y, en muchos casos, el agricultor. La clave de todo, según denuncia Amparo Aguilar, responsable de acción sindical para el sector agrario en la agrupación Intercomarcal de Comisiones Obreras, ha sido la irrupción de las Empresas de Trabajo Temporal quienes se han convertido en prácticamente la única puerta de entrada al mundo agrario.

El mejor ejemplo lo cuenta Antonio —nombre falso puesto que no quiere que se conozca su identidad por miedo a ser calificado de «conflictivo»— quien a sus 60 años se encontró con la necesidad de pedir trabajo después de que su empresa cerrara. «Visité muchas empresas de la naranja y ninguna necesitaba a nadie, pero cuando acudí a una ETT descubrí que me mandaban a los mismos sitios en los que yo había preguntado» declara. Pero aquello fue el menor de sus problemas: «cuando entré por ETT me pagaban a 80 céntimos el cajón de Navelina» —1,28 según el precio que marca el convenio de recolección—  «y las sanguinel a 60 céntimos»—de nuevo por debajo del convenio que marca 1,39 por cada 20 kilos recogidos— «y las clemenules a 1,18» —2,25 según establece la tabla salarial— afirma el afectado.

Los bajos precios no son el único punto extraño que encontró este veterano trabajador en su nueva andadura laboral, la coordinadora de campo— el cabo de la cuadrilla— ya no recogía naranja como se ha hecho siempre, y exigía un cajón de cada cinco de los que recolectaban sus trabajadores,  en el salario final le faltaban 140 euros, «me habían pagado en un día sólo dos euros de salario» relata, y una baja laboral por dolores en la espalda se convertía en la rescisión de su contrato por «fin de campaña» cuando aún estaban en diciembre.

Estos bajos salarios, unidos a desplazamientos que pueden llevar hasta los trabajadores a provincias límítrofes como Alicante o Tarragona, son los que, según señalan los sindicatos, han propiciado la proliferación de inmigrantes en los campos. «Son personas que no tienen gastos fijos como las hipotecas, y en muchos casos ni siquiera tienen familias, lo que les hace más proclives a aceptar un salario tan bajo. Pero lo que aún es más importante, el trabajador que viene de fuera no conoce los convenios, ni los derechos que se ha reconocido siempre a los trabajadores del campo. En resumen, son trabajadores que se les puede engañar más fácilmente» explica Amparo Aguilar.

Esa es también la experiencia de Juan—también nombre falso—un joven de 27 años que llevaba cinco años sin trabajar cuando buscó empleo en  la recogida de naranja. «Entré a trabajar un día a las siete de la mañana y a las nueve y media me dijeron que me fuera a casa, con el resto de españoles, la situación fue tan escandalosa que mi compañero rumano se marchó conmigo de aquel sitio» relata. Según considera esa situación «no es una cuestión de racismo, sino de que los inmigrantes reclaman menos cuando pasa algo raro a la hora de hacer la cuenta de cajas. No a todo el mundo le pagan lo mismo por el mismo trabajo».

 De hecho Juan relata como tras trabajar 16 días se encontró con que sólo había cotizado cinco, y le habían ingresado 240 euros, «meses después y en dos plazos, uno de 60 euros y otro de 180». Y esa retribución es de antes de afrontar los gastos que deriva tener que desplazarse a localidades como Alzira, Xàtiva, o Benimodo. «Un día hice cuentas y descubrí que, quitando lo que pagaba con quien compartía coche para gastos de gasolina y la comida que me tenía que llevar, estaba ganando sólo cinco euros al día por estar 10 horas fuera de casa. Y eso cuando ganaba, porque a veces vas, llueve y te mandan de nuevo a casa sin ganar nada» asegura.

La situación en los almacenes no es mucho mejor. Ana, una trabajadora de 52 años, se encontró con que  entraba por ETT al mismo almacén donde al pedir trabajo le habían asegurado que no necesitaban mano de obra. «Estuve trabajando un año haciendo labores de confección en una empresa de Los Valles y perdí dinero, por extraño que suene, por ir a trabajar» afirma. En su caso el problema fueron las modificaciones laborales que planteó la ETT bajando el precio prometido por hora y, lo que es más importante, las horas extras «Nos dijeron que las horas cobrabamos a 6,93 las horas normales y siete y algo las extras, pero de repente nos llaman y las extras van a a ser 4,99 y las normales a 6,37. Que si no lo aceptábamos nos despedían inmediatamente porque había muchas personas esperando nuestros puestos»,  el nuevo contrato, además tenía otra trampa, sus horas se rebajaban de 40 a 20 horas, «con lo que gran parte de las horas reales de trabajo se contabilizaban en la tarifa más barata».
 
Manifestación en Los Valles
El cambio de modelo en las relaciones agrarias en el Camp de Morvedre preocupa espacialmente al sindicato local de Comisiones Obreras, que ha convocado para el próximo lunes dos en las cercanas poblaciones de Faura y Benifairó, municipios de fuerte tradición agrícola y a la que están convocados collidors de toda la comarca. La marcha arrancará desde Benifairó a partir de las siete de la tarde y marchará por las calles de la población hasta finalizar en la vecina Faura. La intención de los convocantes es dar así mayor visibilidad a los afectados por este nuevo sistema de contratación que, en opinión de Comisiones Obreras, supone un fraude al trabajador que se ve privado de los derechos que les reconocen los convenios colectivos.
 

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Modificado por última vez en Viernes, 07 Marzo 2014 01:51

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