Este 2020 que ahora finaliza ya se ha ganado un sitio destacado en los libros de historia, dentro de un siglo se recordará como el año de la pandemia, exactamente igual que ahora se habla de la mal llamada gripe española de 1918, que realmente vino de los EEUU. La verdad es que hacer un análisis, aunque sea de puntillas, sobre cómo ha funcionado este ejercicio a nivel local, no es nada sencillo porque la capa del coronavirus da mucho de sí y lo puede justificar todo. Ya dije en su momento que el COVID-19 sirve para un roto y para un descosido.

En el ámbito municipal, podría decirse que el consistorio ha estado más cerca de los ciudadanos, de los comerciantes, de los hosteleros, de la gente más necesitada. El resultado final habrá sido mejor o peor, pero esa cercanía por parte del Gobierno municipal y del alcalde, no se puede negar. A esto también ha contribuido la actitud de la oposición, que ante la lucha contra el virus ha hecho frente común con el Gobierno y, de esta manera, con una acción unitaria bastante sólida, se han ido afrontando los problemas y soslayando las críticas. Tampoco hay que perder de vista que la administración local da de sí lo que da de sí y, por tanto, tampoco se puede llegar a todo.

Los asuntos que están pendientes, en algunos casos desde hace años, se volverán a retrasar unos meses más porque durante este tiempo tampoco ha funcionado la maquinaria administrativa municipal como lo hubiera hecho en circunstancias normales. El teletrabajo, que se ha revelado como una modalidad muy positiva, también tiene sus limitaciones. A nivel industrial, ya se ha visto nítidamente cuánto depende del sector del automóvil la industria más importante del municipio de Sagunto. Si no llega a ser por la aplicación de los ERTES, la catástrofe a nivel de empleo habría sido brutal.

Pero no todo van a ser malas noticias, en medio de la pandemia y sus efectos, también hemos conocido en este 2020 el pistoletazo de salida para iniciar las expropiaciones del futuro Parc Sagunt II, la conexión del puerto marítimo con la red nacional de ferrocarriles y la puesta en hora, gracias a la inversión de la APV, de la línea ferroviaria Sagunto – Zaragoza. Ni que decir tiene que sobre estas tres actuaciones se asentará un nuevo desarrollo económico de Sagunto y su comarca que ya apunta maneras con la práctica liquidación de todo el suelo disponible en Parc Sagunt I.

Ahora, cuando ya se han administrado las primeras dosis de la vacuna, todo parece indicar que este próximo año comenzará a despejarse el horizonte, arrinconando la pandemia y volviendo a la normalidad. Feliz 2021.