Multiópticas Comenge realiza visitas por los colegios de la localidad con el objetivo de diagnosticar problemas que eviten el fracaso escolar

Alrededor de un 30% de niños en edad escolar necesitan consulta por problemas visuales y/o auditivos

Jueves, 15 Febrero 2018 11:58

webcomenge1dentroPatricia Chiva Pobo y MªAmparo Conversa, de Multiópticas Comenge junto al director de Tarrazona, Juan Manuel Salor.

Cuidar la vista es algo muy importante en la salud de las personas, algo que debe hacerse desde bien pequeño y que muchas veces se pasa por ato o no se le da la relevancia que merece. Conscientes de ello, Multiópticas Comenge ha realizado unas jornadas de prevención visual y auditiva en el CEIP Maestro Tarrazona de Puerto de Sagunto, una iniciativa con la que pretenden seguir en todos aquellos centros de la ciudad que se presten a ello.

Un proyecto gracias al cual los más pequeños pudieron ser conscientes de la importancia de realizarse revisiones y cuidar de un modo adecuado sus ojos. Una iniciativa con la que los especialistas pudieron reconocer varios casos de niños que, como explican a El Económico, «no se les había hecho ningún control adecuado para ello y que necesitan corrección optométrica y/o auditiva para la evolución adecuada del niño».

Unas revisiones que recomiendan realizarse a partir de los 5 años a todos los niños, ya que, explican «muchos problemas de fracaso escolar son debidos a alteraciones oculo-auditivas. Por esta razón hemos querido contar con nuestros especialistas para detectar estas deficiencias relacionadas con los aprendizajes escolares, con el fin de solucionar a tiempo estas posibles barreras», manifiestan desde la óptica.

Una iniciativa que estos especialistas querían llevar a cabo tras observar en sus gabinetes que mucha de la población infantil necesita corrección optométrica y/o auditiva, ya que muchas veces estos problemas están relacionados con el fracaso escolar y los padres no son conscientes de dicho problema. «La mayoría de veces, los niños vienen porque los profesores han notado algún síntoma significativo en las clases y nos los derivan a nuestros centros. En otras ocasiones, son los padres los que por iniciativa propia vienen a que les realicemos un examen, o bien porque han detectado algo o porque ellos mismos necesitan prescripción. Es importante que, por un motivo u otro, o por previsión se realice una consulta a los niños a partir de los 5 años para evitar futuros problemas».

Y aquí, en los colegios, y a partir de revisiones primarias, es donde esta óptica se pone manos a la obra para, como explican, poder llevar a cabo el objetivo de estas visitas «detectar posibles anomalías visuales y auditivas para poder solucionarlas lo antes posible y evitar, dentro de lo que podamos, el fracaso escolar».

Comenzar a realizarse estas revisiones a temprana edad es, como explican los especialistas «los síntomas en algunos de los niños son más fáciles de detectar que en otros, ya que dependiendo del error refractivo que tenga el niño se detecta antes que otras alteraciones que se quedan enmascaradas, y por lo tanto los padres difícilmente pueden sospechar de un problema». Al respecto afirman haber tenido bastantes casos de este tipo, por ello, insistimos «recomendamos una revisión periódica a todos los niños a partir de 5 años».

Un proyecto con el que también los niños se muestran encantados, como cuentan los especialistas y «con el que se ayuda a la detección precoz, pudiendo evitar anomalías que si no se tratan a tiempo pueden ir a más dando lugar, por ejemplo, a un ojo vago, a problemas acomodativos, problemas fusionales y vergenciales, entre otros», explican desde la óptica.

Gracias al trabajo de esta óptica, muchos niños que no habían sido diagnosticados han sido tratados y han mejorado su calidad de vida. Un trabajo, insisten, de suma importancia y que pretenden seguir haciendo cada curso escolar en todos aquello centros de la localidad que lo deseen para ayudar a los más pequeños/as.

Alrededor de un 30%. Este es el porcentaje aproximado de niños en colegios que Multióptica Comenge ha detectado que deben acudir a consulta para un examen más completo, un número de niños que tal vez si no fueran por estas revisiones no conocerían su problema hasta pasado unos años.

Observar cualquier desviación de los ejes visuales de los niños como por ejemplo si se acercan mucho a las pantallas, o al leer, al ver la tele, si tienen picor de ojos o dolores de cabeza, son algunas de las recomendaciones a las familias que dan desde la óptica para poder detectar algún problema. La falta de atención cuando se les llama y el abandono de las tareas escolares también puede indicar alguna posible alteración visual o auditiva, por lo que recomiendan atención.


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Modificado por última vez en Viernes, 16 Febrero 2018 17:44

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