La Conselleria de Sanidad va a poner en marcha una nueva campaña de concienciación sobre la importancia del uso del preservativo como medida de protección frente a las infecciones causadas por enfermedades de transmisión sexual. Esta campaña se desarrollará desde el 26 de noviembre, coincidiendo con el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, que se conmemora el 1 de diciembre. Su difusión se centrará en el transporte público, las redes sociales y los medios de comunicación.
Así lo anunciaba hace algunos días la directora general de Salud Pública de la Conselleria de Sanidad, Ruth Usó en la sede del Colegio de Farmacéuticos de Valencia.
Durante su intervención, Usó alertó de que en los últimos años se ha producido en la Comunitat Valenciana «un ligero incremento en el número de casos de VIH y sífilis, y un aumento importante de casos de otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) como gonorrea y clamidia. De ahí la importancia de apostar por la concienciación, la prevención y el uso del preservativo», enfatizó la representante de la administración autonómica.
En concreto, mientras que en 2019 se registraron 393 nuevos casos de VIH, el pasado año se contabilizaron 464. En ese mismo periodo también ha aumentado la cantidad de casos nuevos de sífilis, pasando de 455 en 2019 a 731 en 2022; de gonorrea, de 1.432 a 2.091; y de clamidia, de 1.711 a 2.261.
Además, la directora general de Salud Pública recordó que la Comunitat Valenciana cuenta con un dispositivo asistencial especializado en procesos transmisibles compuesto por los Centros de Información y Prevención del SIDA (CIPS). «En ellos, los profesionales especializados informan de forma confidencial y anónima a cualquier persona de todo aquello que necesite saber sobre la infección por VIH, su prevención y transmisión, así como sobre cualquier otra infección de transmisión sexual», explicó.
El personal de estos centros detalla cuáles son las medidas preventivas que se deben adoptar para evitar la infección por el VIH, así como el momento más adecuado para realizar la prueba de detección de la infección en caso de que se hayan mantenido prácticas de riesgo. «Si el resultado revela que se ha producido la infección, el personal de los CIPS ayuda a afrontar el momento y ofrece a la persona el acceso al nivel de atención sanitaria que requiere. También informa de los recursos existentes -sanitarios, sociales, legales, entidades del tercer sector- y ofrece consejo para evitar la reinfección y la infección de otras personas», detalló la directora general de Salud Pública, Ruth Usó.
También en cualquier centro de salud, los y las profesionales de Atención Primaria pueden ofrecer información, realizar las pruebas pertinentes o derivar a la persona al recurso específico más adecuado.
