Jesús Margalef Hernández, enfermero de Puerto de Sagunto afincado desde hace años en Albalat dels Tarongers, publicará muy pronto dos libros donde muestra diversos trabajos de investigación que ha estado realizando a lo largo de su carrera. En el primero de ellos, en el que lleva trabajando desde hace más de un año, habla sobre Gestión de recursos desbordados ante una pandemia, ¿una transmisión respiratoria?, centrándose en la población de su ciudad natal, de la que asegura que «lo que más me ha llamado la atención es que la gente está muy concienciada, para mi sorpresa, como se ha reafirmado con más de un 80% de la población vacunada». El segundo de estos trabajos, Estudio descriptivo de la atención sanitaria en bous al carrer, es una guía con la que pretende ofrecer herramientas a sus compañeros de profesión para facilitar su actuación en este tipo de festejos. Por ello, Jesús Margalef quiere dejar claro que «no se trata de un libro que habla sobre bous al carrer si no sobre la asistencia humana que prestamos los profesionales sanitarios a los pacientes que atendemos».

Para quien no le conozca, ¿quién es Jesús Margalef?

Jesús Margalef es un enfermero, padre de familia e investigador independiente.

¿Cuándo descubre que se quiere dedicar a la enfermería?

Esto es algo vocacional. Yo empecé estudiando Económicas y, ese verano, me llamaron para trabajar del Hospital de Sagunto como celador y descubrí que eso era lo mío. De Económicas no se puede pasar, directamente a Enfermería así que hice un ciclo formativo de Laboratorio en Diagnóstico Clínico, donde conocí a muchas buenas personas, y luego cursé la carrera de Enfermería; desde ahí es mi vocación, no es ir a trabajar sino ir a ayudar y cuidar a mis pacientes.

¿En qué momento pasa de dedicarse únicamente al mundo de la Enfermería a esa parte más de querer investigar?

Empecé primero formándome como instructor de Soporte Vital Básico, luego continué con Soporte Vital Avanzado, que es algo más especializado dedicado a médicos y enfermeros. Me dí cuenta de que había muchas carencias en primeros auxilios, que vienen desde el colegio. Por ejemplo, si vas por la calle solo una de cada diez personas sabría actuar en el caso de urgencia médica. Entonces, decidí mejorar eso ofreciendo formación gratuita, investigando, mejorando la maniobra Heimlich, etc... Es importante decir que la enfermería y la medicina, en general, no se pueden quedar estancadas, tenemos que seguir avanzando. Hemos evolucionado, por ejemplo, ahora tenemos la realidad aumentada y la realidad virtual con la que se entienden mucho mejor las cosas, estas nuevas técnicas hemos de aplicarl​as a las enseñanzas de los futuros enfermeros o de los enfermeros actuales para que su desarrollo profesional sea mucho mejor.

Es importante entonces el reciclaje en los profesionales sanitarios.

Efectivamente. Cuando investigamos, las conclusiones se las trasladamos a otro investigador que las revisa y éste se las pasa a otro y, cuando estamos todos de acuerdo, entonces lo lanzamos, no es algo imperativo de una sola persona, entre todos colaboramos. Creo que los investigadores no estamos muy valorados porque podemos hacer un avance fundamental por la cura del cáncer y eso vale menos que un gol en la Champions. La realidad es así de triste.

Después de la pandemia de la COVID-19, ¿se ha puesto más énfasis en la necesidad de la investigación?

Una de las cosas buenas que ha traído la pandemia, dentro de todas las desgracias con las muertes y los efectos secundarios causados por la enfermedad, es que la comunidad científica internacional se ha unido y eso es lo mejor que nos ha podido pasar. Esto nos ayuda a avanzarnos y a ser mejores profesionales.

Vas a publicar próximamente dos libros y uno habla, precisamente, de la pandemia, ¿por qué se decidió a escribir sobre ella?

Cuando esta pandemia llegó, por sorpresa, tan desconocida y tan agresiva, y prudencia porque esto aún no se ha acabado por desgracia, decidí, dentro de mis posibilidades, que era mi ciudad, Sagunto, ver cómo estaba reaccionando la gente, cómo le afectaba en el día a día. Gracias a este estudio, yo me he podido avanzar mucho a cosas que están pasando hoy, sé que la gente se ha cuidado mucho, que ha tenido mucho respeto y cuidado por nuestros mayores, etc... En algunas ocasiones se ha hablado de que la hostelería y la juventud han sido los culpables de determinados brotes pero yo quiero romper una lanza en favor de ambos colectivos porque la gran mayoría de ellos han respectado las normas, solo ha sido una minoría la que no lo ha hecho.

¿Qué ha necesitado para poder hacer este libro?

Lo primero que investigué fue la relación de causalidad de esta enfermedad, que se transmite por vía respiratoria, luego busqué los métodos de barrera para evitar los contagios. Posteriormente me puse en contacto con la población para ver cómo estaban actuando durante la pandemia. La respuesta ha sido muy buena, hay excepciones pero son las mínimas.

¿Cómo ha sacado esa información ciudadana?

Después de consultar muchas publicaciones científicas para conocer un poco más sobre las circunstancias de este virus, realicé una encuesta masiva que fuera representativa de la población de Sagunto para ver cómo iba funcionando esta localidad. La encuesta la lancé a través de las redes sociales que es un método de trabajo que a nosotros nos facilita llegar a esa información y la respuesta ha sido muy buena porque he tenido unas 1.200 respuestas efectivas y yo estaba buscando unas 700, así que estoy muy contento.

Al ser un estudio del municipio de Sagunto, ¿ha recibido alguna ayuda de la administración local?

Pedí una colaboración, simplemente para que ellos difundieran la encuesta y poder tener una muestra muchísimo más representativa, pero me confundieron con un comerciante y ahí se quedó el asunto. De hecho, el único político local que ha mostrado interés en mis proyectos ha sido Manuel González, no lo conozco personalmente pero me pidió que le pasara la encuesta, se interesó para poder participar en el estudio. Además también tengo que agradecer al alcalde de Gilet, Salvador Costa, al concejal de este municipio, Carles Catalunya, y a las chicas de la farmacia de Albalat dels Tarongers que siempre me están apoyando en todos mis trabajos.

¿Qué nos podemos encontrar en este libro?

La reacción del municipio de Sagunto a las medidas tomadas contra el coronavirus, si están conformes con las restricciones que se nos han impuesto, hay muchísimas respuestas que son muy interesantes que, al cabo del tiempo, con las medidas que se han tomado, se han dado cuenta de que el trabajo estaba muy bien encaminado; yo lo comparo con el trabajo de los vulcanólogos que ahora se está dando a conocer, que predijeron que iba a erupcionar un volcán y han podido salvar muchas vidas. Haciendo este tipo de trabajos de investigación, puedes ayudar a que la población tome conciencia, a que sepa que hay que protegerse porque esta es una pandemia imprevisible.

¿Qué es lo que más le ha llamado la atención a la hora de recoger los datos que se muestran en el libro?

Lo que más me ha llamado la atención es que la gente está muy concienciada, para mi sorpresa, y eso que estábamos prácticamente empezando la pandemia porque la muestra la cogí desde mediados del mes de marzo hasta el verano de 2020, los primeros meses de la pandemia. De hecho, luego se ha reafirmado en que estamos en más de un 80% de la gente vacunada, por encima de la media nacional. Es excelente la población de este municipio. El problema de todo lo que ocurre con esta pandemia de la COVID-19 es que tiende a desactualizarse porque los datos cambian constantemente, afortunadamente para bien.

Dice que la gestión de la pandemia a nivel social ha ido bien, ¿pero cómo lo ha hecho a nivel institucional?

Creo que ha faltado el apoyo de los expertos porque hay mucha gente que sabe mucho a la que se le ha silenciado o no se le ha ayudado como toca porque esto ha sido cambiante. A nivel local también ha sido complicado.

¿Cree que esta pandemia nos ha hecho mejores personas?

No. Solo tienes que mirar la situación política, enfrentados todos en vez de sentarse para hablar.

¿Ha servido para darnos cuenta de lo importante que es la sanidad en este país?

Tampoco. Ahora mismo hay una falta de recursos inmensa. La administración lo sabe y mira hacia otro lado. A nivel social, además, cambiaron los aplausos del principio por indiferencia después. Ahora no se acuerda nadie de los sanitarios, que han puesto casi 40 millones de vacunas, no se valora el trabajo que se ha hecho, no se valora la calidad de la sanidad de este país.

Además de este libro que ha escrito sobre la pandemia, también publicará pronto otro titulado Estudio descriptivo de la atención sanitaria en bous al carrer. Se ha dedicado muchos años a la atención sanitaria en este tipo de festejos, ¿por qué era necesaria realizar una guía como ésta?

Es una guía para mis compañeros porque en este tipo de festejos nos podemos encontrar todo tipo de atenciones. La gran mayoría de ellas suelen ser erosiones, de alguien que se ha caído o se ha dado algún golpe, pero hay sobre un 10% de casos que son situaciones complicadas en las que tenemos x minutos para salvarle la vida a un paciente. Este libro no quiero que cree polémica. Soy consciente de que hay mucha gente animalista, en contra de este tipo de festejos, pero quiero dejar claro que no se trata de un libro que versa sobre bous al carrer si no sobre la asistencia humana que prestamos los profesionales sanitarios a los pacientes que asistimos. Es un libro que no habla solo de cómo tenemos que atender a una persona que presenta una cornada si no de las diversas situaciones que nos podemos encontrar; por ejemplo, a mí, una vez, me trajeron a la ambulancia a un niño de meses que se había caído desde una altura de metro y medio. Este libro habla de cómo salvar la vida a los pacientes, es una guía con muchas fotos con casos reales que he tenido que espero que ayude a muchos compañeros. Es un libro gratuito que cualquiera que me lo quiera pedir estaré encantado de facilitárselo.

¿Cuándo empezó a trabajar en este libro?

Este libro se inició en 2008, lo tenía un poco en stand by y como iba a publicar el de Gestión de recursos desbordados ante una pandemia, ¿una transmisión respiratoria?, pues me decidí a finalizarlo y a publicarlo también.

¿Qué consejos podría destacar de los que ofrece en esta guía?

Lo primero que digo es que nunca puedes estar tranquilo en este tipo de festejos porque nunca sabes lo que te puede venir, esté el toro fuera o no lo esté, y tienes que estar preparado para que un lapso de tiempo puedas salvarle la vida o estabilizar a un paciente para que cuando llegue al hospital completen los cuidados. Nosotros en la ambulancia hemos de realizar técnicas que estabilicen al paciente. El buen hacer de todo el equipo que forma la ambulancia es la calidad que le damos al paciente, somos un equipo. Es un libro basado, en gran parte, en experiencias personales. Nosotros no estamos solo para lo que ocurre en el acto taurino si no que estamos para ayudar en todo lo que pase alrededor del evento.

¿Cómo surgió la posibilidad de publicar estos libros?

Creo que era el momento de publicar los libros. Me puse en contacto con la editorial Ocronos, les envié los bocetos de los libros, le gustaron mucho y se trabajó hasta que se han editado ambos libros; a pesar de que son libros que podría leer cualquier persona, son textos más científico-técnicos por ello, los que quieran tenerlos, pueden ponerse en contacto conmigo. Ya tengo la idea del próximo libro que será más sobre anécdotas del mundo de la enfermería en clave de humor.

¿Alguna cosa que quiera añadir?

A pesar de que se habla mucho de la pandemia, cabe recordar que la principal causa de muerte hoy en día siguen siendo los accidentes coronarios, por lo que la gente que tiene problemas de corazón, de tensión y relacionados con el aparato circulatorio son los que tienen un mayor riesgo, y creo que también es importante que se le dé visibilidad a un problema con el que nos estamos encontrando como son los suicidios, que es una de las tres causas de muerte en España, la primera entre los jóvenes, algo que teníamos silenciado y me gustaría poner énfasis en que existen problemas de salud mental y tenemos herramientas para poder solucionarlos. Hay gente que tiene problemas por decir que va al psicólogo y creo que no pasa nada. La salud mental es muy importante y tenemos que cuidarla, y eso también es algo que se ha puesto de relevancia con la pandemia cuando antes era tabú.