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Ignacio Belzunces Muñoz

Ya lo dije

Viernes, 10 Septiembre 2021 21:09

Ya lo dije, la remodelación del paseo marítimo será la principal baza electoral de Darío Moreno en las elecciones municipales de mayo de 2023. El alcalde necesita un banderín de enganche muy potente para crecer en el Puerto, donde Compromís tiene más dificultades para sumar votos. Ya se sabe que en Sagunto el pescado está muy repartido, así pues, los socialistas deben tirar las redes en los ricos caladeros porteños, que son muy propicios para distanciarse un poco más del resto y, de paso, debilitar a los segregacionistas.

El paseo marítimo se construyó en la década de los 80, tras el cierre de la cabecera siderúrgica, y fue sufragado en su totalidad con fondos del Estado. Ya han pasado cerca de cuarenta años y la verdad es que necesita algo más que una mano de pintura. En 2008, Costas nos presentó un proyecto de remodelación integral que incorporaba en el paseo los 70.000 metros cuadrados del malecón de Sierra Menera, que, por entonces, no era de propiedad privada. El Estado aportaba 20 millones de euros de la época para acometer el proyecto que contemplaba, además, un trasvase de arena de 400.000 metros cúbicos, desde la playa del Puerto para las del Almardà, Corinto y Malvarrosa, que por aquellas fechas ya presentaban un problema severo de regresión. Finalmente, el gobierno municipal del momento tomó la decisión de rechazar esta inversión.

Desde entonces han pasado más de doce años, el paseo ha ido a peor, los terrenos del malecón ya son de propiedad privada y, por si faltara algo, las actuaciones previstas por Costas al sur de la provincia de Castellón terminarán afectando a la playa porteña. Con esta situación, el gobierno municipal de Sagunto solicitará la concesión del paseo marítimo. Cómo ha cambiado el cuento, ahora es el municipio el que tiene que presentar un proyecto al Estado de cómo piensa remodelar el paseo marítimo y, en el supuesto de que sea aceptado, Costas le transmite la concesión por un determinado periodo de tiempo. A partir de aquí, es el Ayuntamiento el que asume los gastos de ejecución del proyecto, que, con toda seguridad, será de varios millones de euros. Este melón ya lo abrió en la pasada legislatura el nacionalista Francesc Fernández, que solicitó al Estado la concesión de la fortificación del Grau Vell para acometer su rehabilitación que, por cierto, nos ha salido por 1,6 millones de euros.

Como el paseo marítimo será arma electoral, ahora se encargará a una empresa que redacte el proyecto, se presentará a Costas para respaldar la solicitud de concesión y, con toda seguridad, el Estado dará luz verde a esta petición antes de las próximas elecciones. Como ven, todo muy planificado, aunque la ejecución, si se lleva a cabo, se hará en la siguiente legislatura.


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