Recientemente se ha publicado en la prensa local el último problema surgido por la deficiente gestión de nuestro ayuntamiento. El pasado dos de octubre, vencía el contrato de suministro de carburante para los vehículos municipales. Sin embargo, para esa fecha aún no estaba claro con quién se iba a firmar el nuevo contrato, por lo que se instaba a los empleados municipales a que llenaran los depósitos mediante la siguiente sugerencia enviada a través del correo corporativo: «se recomienda que con anterioridad a esa fecha se realice la carga de combustible que técnicamente sea viable».
Esto no deja de ser una anécdota más del pésimo funcionamiento de una administración local que entre ayuntamiento, Sociedad Anónima de Gestión (SAG) y Empresa Mixta, supera de largo los 1.100 empleados. Pero centrémonos en el Ayuntamiento, que, desde un tiempo a esta parte, da síntomas de funcionar como una república bananera.
Desde principios de año, nos hemos encontrado con el problema de la falta de folios, para realizar nuestro trabajo diario. Tanto es así, que en Iniciativa Porteña optamos por la medida de ir comprando algún que otro paquete para poder trabajar en el despacho del que disponemos en la casa consistorial. Parece ser que, por fin, tras casi 9 meses, se gestó la solución para poder recibir el suministro de este preciado material. Imaginen ustedes, el porqué no salen las cuestiones más importantes, si con estas minucias perdemos casi un año.
Agua. Fíjense ustedes que teníamos unas fuentes de agua potable en los edificios públicos, que eran repostadas con garrafas suministradas merced a un contrato que también caducó. El suministrador, ante la falta de pago por parte del ayuntamiento, dejó de colocar los filtros y de traer el agua, con lo que nos quedamos también sin el líquido elemento… hace unos días se han llevado hasta las fuentes. Según la regidora de Personal, que por cierto, elude su responsabilidad afirmando que no están obligados a suministrar agua potable a sus empleados, en unos días subsanarán ese problema …en este asunto, sobrepasamos ya el año bebiendo agua de las botellas que compramos en los comercios cercanos.
El funcionamiento administrativo del Ayuntamiento de Sagunto es desastroso, con expedientes de los que no se hace cargo ningún departamento, que si esto es de Secretaría, que si es de Intervención, que si la administración electrónica, que no está el responsable, que falta personal en vacaciones, que falta personal fuera de vacaciones, que se ha perdido un expediente, que falta una coma… realmente lo que falta es liderazgo y personas con la capacidad de gestionar una administración consumida por la más absoluta desidia.
Y si esto pasa con las pequeñas cosas del palacio, imaginen ustedes lo que pasa con las pequeñas cosas del día a día, las que afectan a nuestros vecinos… limpieza, accesibilidad, transporte, asfaltado, jardinería, solares, etc.…Ya me dirán ustedes, que puede ocurrir con este gobierno municipal, si no son capaces de comprar un paquete de folios o dos botellas de agua, ¿cómo van a hacerse cargo de un municipio tan complejo como es el nuestro?
De las grandes inversiones mejor hablaré en otro artículo, porque en ese capítulo, como ustedes ya se habrán dado cuenta, se han lucido. Apenas han hecho uso del dinero consignado a inversión pura y dura, con lo que están pendientes muchas de las promesas realizadas en los últimos años. Como dice el título de una conocida película: Amanece, que no es poco… demos gracias a que el amanecer, al menos, no se gestiona desde el Ayuntamiento.