Ya hemos pasado el ecuador de la legislatura. En mi caso esperando con ansiedad, en ocasiones angustiado al ver la manera de gobernar que tiene ese grupo de partidos que dicen compartir espacio en la izquierda, aunque la realidad es que lo único que comparten es un acuerdo para tener un montón de liberados y “enchufados”.
Dada esa falta de cohesión real, llevan el municipio como si de una república bananera se tratara, vendiendo humo y más humo, pero sin nada importante desarrollado hasta la fecha. Que me expliquen que grandes proyectos han sido capaces de desarrollar. Ya les anticipo que si sacan algo adelante, será por la inercia de esas obras que vienen de atrás, que cuentan con financiación, pero en las que de momento los que gobiernan han sido incapaces de avanzar tan apenas. Tal es el caso del Pabellón de en frente del cementerio que esperemos que quede desbloqueado pronto, pero no será por la gestión de los concejales de deportes que han desempeñado ese cargo hasta ahora, si bien he de decir que el actual delegado, el señor Chover, le ha dado un plus de calidad a ese puesto, y será el que finalmente mueva este asunto. Pero claro, también dependerá de otras delegaciones que seguro que le dan más de un disgusto al concejal socialista.
La gerencia, está prácticamente en el mismo punto que hace dos años y el museo industrial cada día está en peor estado, fruto de su abandono. El horno alto fue cerrado hace año y medio, y ahí sigue esperando su reapertura, que van retrasando cada mes. La nave de talleres sigue siendo un agujero en las arcas autonómicas para el que no se ha buscado la solución. El proyecto de integración del puerto comercial ya les anticipo que no lo veremos en esta legislatura; y en ese mismo proyecto, el pantalán se nos cae a trozos ante la pasividad del equipo de gobierno que no mueve un dedo ante la autoridad portuaria.
El instituto número cinco que tanto nos prometieron, al igual que el centro integral de formación profesional, siguen esperando su momento. Lo mismo podríamos decir de la fachada marítima, pues la plaza de la concordia fue demolida y así continúa, al igual que el paseo azul que tenía que unir las playas de El Puerto y Canet, como ese puente por el que estamos luchando, pero que los del gobierno municipal no consideran prioritario; pretenden que nos conformemos con los cuatro camiones de hormigón que echaron sobre el lecho del río este verano.
Y qué decir de otros grandes proyectos como el tren de pasajeros hasta El Puerto y las infraestructuras pendientes hacia nuestro puerto comercial y polígonos industriales. Hablando de industrias, la polémica con Lafarge que estos de Compromís pretenden cerrar. Y así una detrás de otra. Las afrentas son continuas, respecto a limpieza, al mercado, a las fiestas… a diario escucho en El Puerto quejas de lo mal que lo está haciendo este Alcalde, pero no debemos olvidarnos que si está ahí, es gracias al apoyo de ADN Morvedre (Podemos), EU y PSPV-PSOE, a parte claro está, de su propio partido, Compromís.
Entre todos ellos consiguieron casi 10.000 votos en El Puerto, votos de personas que ahora mismo se quejan amargamente. Espero que cuando llegue el momento de volver a las urnas, no nos hayamos olvidado de estas cuestiones y de muchas otras que están por resolver… Y sobretodo, nos tenemos que dar cuenta de que por mucho que se vuelquen en Sagunto con el actual Alcalde, los porteños tenemos la sartén por el mango y con ello la posibilidad de cambiar las cosas. Somos dueños de nuestro destino… Quedan 20 meses para acabar definitivamente con este gobierno municipal…
