Ni trenillo ni tren

Viernes, 11 Noviembre 2016 17:21

Hace más de un año que Teresa García, diputada autonómica y concejal del Ayuntamiento de Sagunto por Compromís, dio a conocer el informe INECO, en el que se recogían varias posibilidades para que la línea de Cercanías de Renfe llegase hasta el Puerto de Sagunto. Entonces todos creímos que el citado proyecto, que contaba con el beneplácito de todos los grupos políticos de la Generalitat, pronto nos iba a permitir contar con este servicio de tren tan necesario para los habitantes del Puerto, y que es, sin duda, la más importante aspiración de nuestra población, por lo que debe ser también una de las prioridades de nuestro Ayuntamiento, haciendo llegar al Gobierno Central, y más concretamente al Ministerio de Fomento, la necesidad de que apremie a las empresas ADIF y RENFE, para que den una rápida solución a este tema.
 
A este respecto debemos recordar que en el informe de INECO se acreditaba la viabilidad técnica y económica para que el proyecto fuese una realidad. Entonces, ¿a qué se ha estado esperando? ¿quizá a que el Gobierno Central dejase de estar en funciones?, pues ya hay nuevo gobierno y va siendo hora de insistir en reclamar este servicio al que tenemos derecho, pues somos la única población valenciana con más de 40.000 habitantes que no tiene acceso directo al tren o al metro. Y el caso es que lo tuvimos, porque, aunque en precario, disfrutamos durante muchos años del célebre “trenillo” que nos hizo su papel y añoramos con nostalgia. Recuerdo mi época de estudiante cuando a la una menos cuarto los compañeros que vivían en Sagunto tenían permiso para salir antes, a fin de utilizar el trenillo.
 
Entonces Sagunto y Puerto se comunicaban por este medio de transporte que Altos Hornos ponía a disposición de los ciudadanos de ambos núcleos. Además de los estudiantes, eran muchas las personas de Sagunto que venían a trabajar a la siderúrgica, entonces de Altos Hornos de Vizcaya, y utilizaban el trenillo, así como quienes venían a disfrutar de la playa o gente del Puerto que subía a Sagunto para hacer compras o utilizar los trenes que paraban en la estación con destino a otros pueblos o ciudades.
 
Sin embargo, puestos a recordar, según tengo entendido, no fue el trenillo el primer medio de transporte que unió Sagunto y Puerto, sino que en 1910 ya se utilizaba la “bicicleta”. Y no era el vehículo de dos ruedas que conocemos ahora, sino ese tren que transcurría por el carril, y uno en cada punta de la vagoneta de viajeros al aire libre, iban dándole a la manivela. Y ahora, ni eso, ni trenillo, ni tren. ¿Hasta cuando?

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