Romani itte domum

Viernes, 22 Julio 2016 19:54

Ya estaban tardando mucho en volver a la carga con esa constante de suprimir el topónimo del Puerto de Sagunto, ahora lo hacen de forma más sutil, para que se note menos, pero sin perder comba. A propósito de la reunión mantenida entre representantes consistoriales y de Red Eléctrica Española, dentro de la Comisión Mixta de Seguimiento del convenio suscrito entre ambas partes en tiempos del PP, el Gabinete Municipal de Comunicación emite una nota informativa cuyo titular me resulta llamativo: «El Ayuntamiento de Sagunto y Red Eléctrica de España acuerdan ampliar la Domus Baebia y la adecuación del sendero del río Palancia». Luego, cuando entro en el cuerpo de la noticia, me sorprendo aún más: «la compañía aportará 300.087 euros para el desarrollo de un itinerario sostenible por el delta del río Palancia, entre Sagunto y Canet de Berenguer». A partir de aquí pienso que esos fondos se invertirán en promover una senda que vaya desde Sagunto hasta el municipio de Canet.
 
Después de hacer las consiguientes averiguaciones, resulta que ese Sagunto es la playa del Puerto de Sagunto; que el itinerario sostenible por el delta del río Palancia, entre Sagunto y Canet de Berenguer, es la vereda que cruza el delta, paralela al litoral, entre el final de la playa porteña, donde está el espigón de Ciudadmar, y el puerto deportivo Siles. Es decir, que desde el Ayuntamiento de Sagunto, ya han borrado de un plumazo el topónimo de Puerto de Sagunto, algo que, como se ha visto, contribuye a la confusión. Nada nuevo bajo el sol, esto ya lo intentó, entre 2003 y 2007 el otro tripartito de progreso. Es verdad que el municipio de Sagunto va desde el mar a la montaña, como también es cierto que engloba dos identidades distintas.
 
Me recuerdan estos nacionalistas, en su constante cruzada por la construcción nacional, aquella excelente escena de la película La vida de Brian, en la que su protagonista, Graham Chapman, en el papel de Brian, es sorprendido durante la noche por un centurión de guardia, cuando está pintando en latín el siguiente graffiti: «Romanos marchaos a casa». Dado que la frase no está bien construida, el militar le explica cómo se escribe correctamente: «Romani itte domum», y le impone como castigo que la pinte cien veces. Que el activista pidiera a los romanos que se marcharan de Galilea era irrelevante, lo verdaderamente importante es que escribiera bien en latín.
 
En definitiva, pretenden los nacionalistas del Gobierno de Sagunto que los porteños vayamos perdiendo nuestras señas de identidad, así será más fácil imponernos las suyas. Como en La vida de Brian.

Si le ha interesado esta información, puede unirse a nuestro canal de Telegram y recibirá todas las noticias que publicamos para el Camp de Morvedre. Síganos en https://t.me/eleco1986

Más en esta categoría: « Vuelve la tele Populismo »

 

 

SUCESOS

SALUD