23 de junio de 2016

 

El absentismo laboral, se define como la ausencia de una persona de su puesto de trabajo en las horas que le corresponden trabajar de acuerdo a la legislación laboral. Las principales causas de absentismo laboral son: los permisos legales retribuidos, las enfermedades, los accidentes de trabajo y las faltas por causas injustificadas. Este Índice del Ausentismo Absoluto se obtiene de la formula siguiente:

 

                              DIAS AUSENCIA DE TODOS LOS EMPLEADOS

        I.A.A. =-------------------------------------------------------------------------- X 100

                                 TOTAL, DIAS LABORABLES PREVISTOS

 

Las empresas y las mutuas controlan el absentismo de forma individual de las causas para tratar de incidir en cada causa y gestionar la mejora del absentismo. Pero si lo que nos conviene es incidir en aquellas causas que más perjudica a alguien, a las mutuas les conviene, sin duda, no tener bajas por accidente y enfermedad laboral (Contingencias Profesionales), esto les cuesta mucho dinero. En segundo lugar, tiene también interés en no tener bajas de enfermedad (Contingencias Comunes) les sale más barato.

 

El control contra "el absentismo laboral injustificado" debe ser parte de la gestión de los directivos en la empresa, las mutuas y el INSS, yo diría que es una obligación de cada ciudadano contribuyente y cotizante, ya que son parte interesada y perjudicada cuando alguien hace uso indebido y fraudulento de lo que es de todos, los fondos sociales públicos. Pero las mutuas y empresas son menos altruistas, les importa menos los fondos sociales y mucho más sus propios fondos. Y a los sindicatos que les encarguen casos que llevar a los juzgados de lo Social.

 

Conseguir mejorar la competitividad de las empresas es objetivo del estado, de nuestra sociedad y debería ser lo también de los que trabajan y cobran en esas empresas, y el absentismo es una lacra cuando es absentismo injustificado o fraudulento. No negaré que no haya fraude en el absentismo, lo hay. El problema con las mutuas es que su objetivo reductor de absentismo está basado en la negación del daño que sufre el trabajador y el desvió de las enfermedades y lesiones laborales al INSS como “Contingencia Común”. Esta es una práctica criminal que hoy se práctica con autoridad delegada a las mutuas… y el desinterés de los sindicatos impregnados, todavía, de dogmas políticos y correas de transmisión.

 

Todos sabemos que no es lo mismo trabajar en una gran empresa, que en una pequeña empresa. Hay ramos como la construcción, el campo y la hostelería, en los que sí caes de baja por “Contingencia Común” o las pasas muy mal económicamente o te despiden. Trabajar en grandes empresas, eso es otra cosa. Y no supongamos si trabajas como funcionario, que cobran del 75% al 100% desde el primer día estando de baja, salga el sol por Antequera. Si ya esto es pésimo para una gran cantidad de trabajadores, lo que es peor… es que, habiéndote lesionado por causa laboral, te desvíen, por imposición de la mutua, a una baja por enfermedad. Si esto le ocurre… lo tiene muy “jodido” para defender su derecho. Lo que debiera ser determinante rápido y objetivo por el INSS, es totalmente inoperante, lento y con casi total seguridad acabará su caso ante un tribunal de lo social… si es que tiene medios, tiempo y ganas.

 

Si te accidentas en y durante el tiempo en que es tu jornada laboral, debes solicitar la atención en la mutua que la empresa tenga contratada, el parte de accidente debes exigirlo siempre, aunque la lesión sea leve y no sea motivo de baja. Ya hablaremos más delante de estos pequeños detalles, su importancia en el tiempo y en la reincidencia sobre posibles lesiones por causa laboral. La mayoría de los contenciosos con las mutuas y las empresas en el “desvío” de lo que es una lesión o enfermedad profesional se basa en los daños físicos y psíquicos que los trabajadores adquieren por razones ergonómicas, sobre esfuerzos, contagios y toxicidades adquiridas en su trabajo. Esto que es causa muchas veces, de la ruina personal y familiar del trabajador, las mutuas lo utilizan para cuadrar sus cuentas. Y los sindicatos, como mucho, para dar trabajo a sus abogados y plantillas, si es que estas afiliado pagando cuota y te pagas el abogado.

 

Son Mutuas Colaboradoras con la Seguridad Social; esta denominación explica a favor y en contra de quien están diseñadas las mutuas, dan poder a las empresas, a las mutuas y al Estado contra los derechos de protección de la salud y lo social de los trabajadores. Una ley contra la víctima del accidente y la enfermedad laboral propia, se castiga por ser trabajador y enfermar en el trabajo. ¿Los sindicatos? No tienen nada que hacer ni decir en el proceso, salvo el de utilizar al abogado del sindicato… u otro cualquiera, el caso es que le pagues.

 

Si tienes una IT” (Incapacidad Temporal) pero de dudosa causa entre “enfermedad común” y “accidente de trabajo” Se producirá siempre el "desvio" a "enfermedad común" y esto será a costa de tu salud laboral y de tu vida como trabajador. Servirá a la Seguridad Social del Estado, a la mutua y a tu empresa para que gestionen el “Absentismo Injustificado” incluyendo tu hipotética IT, como “Baja por Contingencias Comunes” y no reconociendo tu legitima “Baja por Contingencia Profesional”. ¿Y esto porque ocurre? Por lo ya comentado: Primero por la falta de implicación de los sindicatos (no pintan nada, porque nunca lo pidieron, no les interesa el compromiso); segundo porque la legislación, las normas y procesos son dudosos e interpretativos, están en manos de médicos pagados por las mutuas; y tercero porque los trabajadores no están bien asesorados, tienen miedo de denunciar su caso.

 

Me decía hace poco, un amigo con inquietudes socio laborales, que los trabajadores no reclaman por miedo a que lo “despidan”. Pues si por exigir un derecho legítimo, te despiden injustamente, tienes dos causas por las que reclamar justicia. De traidores y cobardes en la historia pocos hechos se registran. Si estamos seguros de que la causa raíz de nuestra lesión o enfermedad, es debido al puesto de trabajo o se ha producido por la repetitividad o sobre esfuerzos, contaminantes o productos manipulados en el trabajo y la mutua te desvía al médico de cabecera, debemos ir a la Inspección Médica de Sanidad y al INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) para denunciar el hecho y pedir una valoración médica que confirme si es de origen laboral o es enfermedad común. Hacer valer nuestros derechos y exigir lo que es nuestro, es no solo un derecho, también es obligación. El día 28 de Abril los sindicatos celebraban “El Día del Domun” o Día Internacional de la Salud y Seguridad en el Trabajo, y esto decían:

 

Piden más leyes y sindicatos fuertes… Pero no piden IMPLICACIÓN Y FUNCIONES DE GESTIÓ EN LA SEGURIDAD LABORAL. Ni lo piden ni lo pedirán, así sin responsabilidad se vive mejor. En el mejor párrafo de sus discursos (después comida con gambas) el nº 9, dicen lo siguiente:

 

 

Les decía esto:

 

2) Reconocimiento de la obligación del sindicato como interventor en la gestión de la Seguridad en accidentes y la salud en el trabajo. Hoy, todos sabemos que la responsabilidad de los sindicatos respecto a la seguridad, es cero en lo legislativo y cero en ganas de implicación ¿para qué? Solo hay que ver en los accidentes graves (véanse los accidentes del metro en Valencia y el de Alta Velocidad en Galicia) como los jueces no llaman ni siquiera a declarar a los sindicalistas, y menos los veras como acusados de dejación de obligaciones. No tienen responsabilidad. ¡Viva la Pepa!