La declaración de amor se inició ayer, dia 6 de Abril. Comienza la campaña de la declaración de rentas (y patrimonio) para todos los ciudadanos, es el llamado IRPF, o Impuesto Rendimiento Personas Físicas. Este impuesto grava todo ingreso o ganancia que los ciudadanos hacemos o conseguimos en el año anterior ya concluido. Puede parecernos rara alguna, o todas, de estas palabras que prestan su inicial para componer el nombre sintético de este impuesto anual. Seguro que la palabra más clara es la primera Impuesto, es palabra clara y desagradable, significa que hay que pagar, y aunque no sabemos muy bien para que ¡Hay que pagar! Y punto. Está más que claro. Inicio este odiado articulo con "La declaración de amor" por si consigo que todos amemos los impuestos.

 

La segunda palabra de este impuesto es Rendimiento, significa que este impuesto no se aplica sobre los ingresos tal cual nos llegaron, sino después de aplicar las deducciones y otras condiciones que la Agencia Tributaria, a través de las leyes, dispone para tratar de hacer que este impuesto sea lo más justo y motivador posible; es decir, que grave los rendimientos netos en base a circunstancias individuales y económicas de cada contribuyente, esto es lo que hace que este impuesto sea complicado de aplicar. Técnicamente se considera rendimiento neto a la diferencia que existe entre el importe íntegro de las rentas que obtiene la persona física (sujeto pasivo, que en términos callejeros diríamos El individuo) y todos los deducibles según la ley reguladora del impuesto; y que previamente ya hemos descontado las cantidades que no son gravables o que están exentas, por ejemplo una pensión de invalidez. Conseguido el Rendimiento, Hacienda te indica el gravamen a aplicar en forma Progresiva: Así se consigue: que paguen más, mucho más quienes más ganan. Estas rentas pueden provenir del trabajo personal, de rendimientos del capital mobiliario e inmobliario, actividades empresariales o profesionales y empresarios con cargos de nómina.

 

Hay rentas exentas de tributación, como por ejemplo: Exención por despido o cese del trabajador. Becas públicas y las becas concedidas por las entidades sin fines lucrativos. Planes de Ahorro a Largo Plazo. Las pensiones por lesiones o mutilaciones sufridas en la Guerra Civil. Las pensiones por incapacidad permanente de los funcionarios. Las anualidades por alimentos percibidas por los hijos. Las prestaciones por desempleo en pago único y otras muchas. Este impuesto es necesario y justo que sea Progresivo en lugar de Proporcional, es la fórmula que consigue que pueda redistribuir la riqueza hacia quienes están en situaciones más precarias. Los impuestos progresivos persiguen el objetivo de redistribuir la riqueza de la sociedad, teniendo en consideración las capacidades económicas de cada ciudadano. De este modo, se busca un sistema más justo en el que las aportaciones tributarias al Estado son mayores para aquellos que más recursos tienen, pudiendo así reducir la presión fiscal en aquellos hogares con menores ingresos. Es un sistema solidario, por cojones. De no ser así, todas las demás solidaridades no dejan de ser Limosna Cristiana, por mucho que provenga de una Plataforma Progresista.

 

Sin embargo, también hay opositores a la práctica de la progresividad en los impuestos, alegando que el sistema desincentiva el crecimiento económico de los individuos al ejercer una mayor presión fiscal a medida que los ingresos individuales aumentan. Esta teoría realista, se basa en el egoísmo innato de las personas. La mayoría, limita su esfuerzo si es penalizado en exceso, los de fuera no vienen y los de dentro se nos van.

 

 

Para este año, la declaración de IRPF del 2015, se sube el límite para obligar a declarar a quien cobre durante un año de dos o más pagadores. Hasta ahora el límite estaba en 11.200€ y se sube a 12.000€. El límite por un sólo pagador se mantiene en los 22.000€, así como el resto de límites en capital mobiliario e inmobiliario. Quienes no superen estas cifras, no están obligados a declarar. Pero si ha tenido Retenciones, calcule si le sale a Devolver y si es así, haga la declaración, no se lo deje a Montoro.

 

No me he propuesto hacer un cursillo de IRPF, así que vamos a la cuestión política y social de este impuesto, sin embargo le recomiendo que si nunca ha hecho usted mismo la declaración, vaya entrenándose, le conviene. No todos los gestores la hacen bien, las razones son varias, entre la más frecuente está su propia organización y las prisas. Normalmente el gestor suele tener varios/as empleados/as que se reparten el trabajo y los errores ocurren, pero de cara a La Hacienda usted es el responsable, lo peor es cuando los errores son contra su bolsillo, en esto la administración no le avisa, siempre que vaya usted a favor de Hacienda, se lo queda Montoro y no le da las gracias, se rie por que es muy risueño, me encanta Montoro.

 

Este impuesto IRPF y el IVA, son los más importantes y relativamente más justos, paga quien más gana en el IRPF, y paga quien más gasta en el IVA. Es decir, los más ricos mantienen el sistema fiscal. Esta afirmación no será compartida con un montón de “capullos” de espíritu justicialista de izquierdas y progresistas retrasados, pero así es. Para ver cómo contribuye este impuesto sobre este eslogan “Que pague quien más gana” hay que diferenciar Proporcionalidad y Progresividad. Los impuestos son de carácter progresivo cuando el gravamen (%) es igual para cualquier cantidad, por ejemplo: el impuesto del IBI (Impuesto Bienes Inmuebles) en los ayuntamientos se suele poner un coeficiente o gravamen, por ejemplo el 0,7% sobre el valor catastral del inmueble. Este gravamen del 0,7% es invariable y se aplica a los valores variables de los inmuebles, esto es proporcional; y paga más, quien tiene la casa más cara, más casas y más solares. Nadie negará que no paga más, quien más tiene.

 

Los gestores del actual ayuntamiento bajaron (el pasado año) el impuesto del IBI urbano del 0,620% hasta el 0,565%, es decir un 0,055. Que sobre un piso popular con pago anual de IBI de unos 250 €, supone un ahorro para el ciudadano de un €uro y quince céntimos al mes (13,75 €/año). Para mear y no echar ni gota. Pero esto era parte de la entrada triunfal en el Ayuntamiento con la bandera del progresismo libertador, luchadores por la clase trabajadora. La gran injusticia para “El Pueblo” es que a quienes han favorecido es a los grandes propietarios, mansiones de lujo, chalets playeros y de monte, segundas terceras y duodécimas viviendas de negocio y alquiler ilegal. ¡A esos es a quienes beneficiaron! Y lo callaron, piensan que el “Pueblo” es gilipollas. Un €uro al mes no lo dan ni las tías Marías como limosna, les da vergüenza, pero a estos no. Pues bien, camarada, esto es un acto desproporcional y nada progresista. Luego para acabar la faena torera, le suben a unas pocas empresas el IBI para equilibrar las cuentas del ayuntamiento, a algunas esto no significa gran cosa, a las que ya andaban jodidas les ha supuesto una bofetada económica más. Pero es que no es facil comprender que ese impuesto no es contra el “capitalista” es contra la empresa, que es algo muy diferente.

 

El IRPF, es Progresivo, es decir, que el eslogan del IBI “que pague quien más tiene” pasa a ser “que pague más quien más gana” en el IRPF. En el IBI es quien más tiene y aquí en el IRPF es quien más gana. Pero además en este impuesto (IRPF) quien más gana paga desproporcionalmente, paga mucho más. Luego si el eslogan dijese “que paguen mucho más quienes más ganan ” se cumpliría, porque así es, vean:

 

A partir de una Base Liquidable mínima de 12.450 € se aplica el 19 %, el siguente tramo es del 24 % el tercer tramo del 30 %, el cuarto tramo del 37 %, el quinto tramo del 45 % a partir de los 60.000 € todas las cantidades cotizan al marginal del 45 %. Es decir casi la mitad del ingreso en este tramo se lo lleva el siniestro Montoro. El problema de subir por encima del 50 % los impuestos es que pasa a ser progresivamente negativo, quienes deben ingresar al fisco más que lo que se queda en casa, optan por no ahorrar, no invertir y descansar; se pasan a la subvención y a tocarse los huevos. Son impuestos desmotivadores cuando son abusadores, todo tiene su límite. 

 

Ya sabe amigo, hay que declarar bien y todo, esto es el IRPF. Pero es que además hay que pagar las compras con factura e IVA. No se olvide de declarar la cosecha en su totalidad, las mensualidades completas, horas extras incluidas en nómina y nada de sobre aparte, eso queda para algunos del PP, y ya se les acabó la bicoca. Sobre todo... nada de llevarse la pasta sobrante a Panamá, sin antes pagar los impuestos.