Esquerra Unida ha presentado alegaciones ante las Consellerias de Agricultura y Medio Ambiente y a la de Vivienda y Obras Públicas, contra la ampliación del colegio San Vicente Ferrer de Sagunto, «por destruir más de 22.000 metros cuadrados de bosque». Esta modificación urbanística de Sagunto fue aprobada en el pleno municipal del pasado 30 de diciembre con los votos a favor del PP, Compromís, ADN Morvedre y Ciudadanos. Siendo de destacar que por Ciudadanos no votó Blanca Peris, por cuestiones de incompatibilidad, mientras que Sergio Moreno se abstuvo. En contra se pronunciaron los ediles de EU, PSOE e Iniciativa Porteña.
Que Esquerra Unida haya decidido alegar en contra de esta iniciativa no tiene más objeto que salvar su imagen ante los votantes que todavía le quedan, aunque el que más y el que menos sabe que tales alegaciones no son más que un paripé, puesto que Esquerra Unida, que forma parte del Gobierno de Sagunto, podría haber impedido que se tomara este acuerdo. Les aseguro que si el señor Fernández hubiera visto amenazado el sillón de la Alcaldía, no se habría atrevido a dar ese paso, pero como todos sus socios de Gobierno van a comer de su mano, el alcalde campa a sus anchas sin ningún tipo de restricción. Tanto es así, que, según me cuentan, don Francesc achanta a sus socios en las reuniones de las juntas de gobierno. Quiero pensar que no lo hace por autoritarismo, sino por deformación profesional... como se dedica a la enseñanza, es lógico concluir que el maestro, de cuando en cuando, llame la atención a sus alumnos. Lo incomprensible, a mi criterio, es que estos ediles, me refiero a los reprimidos, ante tan manifiesta falta de respeto, traguen y traguen y vuelvan a tragar. Increible.
Por otro lado, también llama la atención que este Gobierno municipal, que está dispuesto a cerrar Lafarge y poner a sus trabajadores en la calle, para proteger los pinos de la montaña del Romeu, tome el acuerdo de ventilarse de un plumazo, sin pestañear, 22.000 metros cuadrados de bosque, para favorecer la ampliación de un colegio religioso. Por cierto, ante esta decisión tan poco ecológica, algunos silencios son atronadores. Además, esta actuación sentencia la construcción del IES núm. 5 en el núcleo porteño, de hecho, el tan reivindicado instituto, mientras gobernaba el PP, se ha quedado fuera del Mapa de las Infraestructuras Escolares de la Generalitat 2016-2019, es decir, durante la presente legislatura no está prevista su construcción en El Puerto, mientras que sí se favorece la ampliación de un centro concertado en Sagunto. A propósito, la gente honesta de Podemos, que haberla hayla, ¿qué piensa de todo esto?
