Qué picara es la derecha. Saben que el “pacto” Sánchez - Ribera no va a ninguna parte, pero que así consiguen un espacio publicitario-electoral para ambas formaciones en un momento en que la aritmética electoral les ha sido bastante desfavorable. Son listos. La falta de unión electoral de IU con Podemos, las “mareas”, Compromís y otros se lo han puesto a huevo en unas elecciones que, por primera vez eran asequibles. Veremos si esta oportunidad histórica se repite.
Mientras, para tranquilidad de la Merkel y los “mercados”, se produce en España un “pacto” antipacto cuyo efecto inmediato se traduce, entre otras, en unas posibilidades tremendas de propaganda electoral para las dos formaciones que lo han suscrito, en un respiro para Sánchez que así elude las asesinas presiones de sus barones y sobre todo para Rajoy, luego explicaré porqué.
Sabemos que el dichoso pacto, como tal, ni va ni puede ir a ninguna parte. Pero ha puesto la maquinaria de fabricación de productos demagógicos a todo trapo: ambas formaciones consiguen un tiempo y un espacio vital para colocar en el mercado todos sus cuentos de hadas, sin compromiso real ninguno, porque saben que no van a gobernar.
No gobernarán, al PP no le conviene apoyarlos. Es algo que jamás hará un partido que está gobernando en la práctica con unos presupuestos que previamente habían aprobado el año anterior en previsión de que algo así podía suceder. Al PP, pero sobre todo a Rajoy, le trae a cuenta cada día que se mantenga aforado y en el gobierno (hay muchos jueces por ahí averiguando cosas) y el dúo Sánchez-Ribera le acaba de solucionar de momento lo suyo: si las próximas elecciones son a finales de junio y luego entramos en un periodo más o menos parecido de no investidura se habrá prolongado la cosa para D. Mariano casi un año más. Un auténtico chollo para la derechona tal como están las cosas.
Y es que las cosas les van de nuevo bien. Y no es que lo diga yo sino los signos evidentes que nos ofrecen sus corifeos: nadie habla de los mercados, ni del Ibex 35, ni de los hombres de negro… ni siquiera de Venezuela. Evidentemente no están nerviosos, la cosa la mantienen en términos estrictamente democráticos: Ya que el PSOE una vez más se descuelga de la izquierda, y, el resto de ella no suma, not problem. Punto. Los capitostes, mafiosos y explotadores pueden de nuevo dormir tranquilos.
¿Cuándo la izquierda entenderá que si pretende cambiar la sociedad o al menos corregir sus peores defectos será absolutamente necesario ganar alguna vez las elecciones? ¿Cuándo nos convenceremos de que lo importante no son sus siglas ni sus historias sino la unidad de aquellos que pretenden realmente meter el bisturí en el cáncer que se está comiendo económica y moralmente al país? ¿Cuando?
