«Este Pleno debe ser el máximo órgano de decisión municipal y, en ese sentido, seguimos manteniendo la postura de que debe recibir el máximo de competencias posibles. Es en el Pleno donde están representados todos y todas las ciudadanas y por eso es en este órgano donde deben tomarse también las decisiones». Así de claro, así de rotundo, y así de tajante, se manifestaba el cabeza de lista de Esquerra Unida, Guillermo Sampedro, en el pleno de investidura que se celebró el pasado junio, cuando se constituyó el nuevo Ayuntamiento. Apenas han pasado 6 meses desde aquel 13 de junio, y toda esa parrafada ya se ha convertido en papel mojado, en pura palabrería de vendedores de mantas apolilladas.
Efectivamente, el tripartito que forman Compromís, Esquerra Unida y ADN Morvedre, la marca blanca de Podemos, tenía programado desde el primer momento que fuera la Junta de Gobierno Local, la que aprobara los presupuestos de 2016, tal y como ha ocurrido esta mañana, después del pleno. Ya lo adelantó el actual alcalde, Francesc Fernández, en la entrevista que publicó este periódico el pasado 23 de octubre: «si no se aprueba en pleno se aprobará en Junta de Gobierno. Esta es una modificación de la ley que hizo el Partido Popular y que, en este caso, nos puede beneficiar». Por lo menos, la primera autoridad local no ha engañado a nadie.
Por tanto, como no había ningún interés en aprobar los presupuestos de 2016 en el pleno, el tripartito ha ido a cubrir el expediente, dando muestras clarísimas del más absoluto desprecio a los partidos de la oposición, a los agentes sociales y a los propios vecinos, con la puesta en escena de este sainete. Lograron unir a PP, PSOE, IP y Ciudadanos, que, en rueda de prensa, denunció estas prácticas. Las principales entidades que participan en el CES, le dieron plantón al alcalde por entender que les trataba de utilizar, sin importar las aportaciones que pudieran realizar al presupuesto. En definitiva, el tripartito ha encabronado, ex profeso, a todos para crear el clima propicio que permitiera argumentar, como han hecho, que lo que buscaba la oposición era bloquear el presupuesto, que es la excusa que se ha utilizado para aprobarlos por Junta de Gobierno. Todo muy burdo y ramplón.
Si Alfredo Castelló hubiera sacado los presupuestos por la Junta de Gobierno Local, les habría faltado tiempo a los dirigentes de estos partidos que hoy gobiernan la ciudad, para tacharlo de fascista o feixista. Ver para creer, ¿verdad? En definitiva, que de nuevas formas de hacer política, nada de nada. Esto es más de lo mismo, de lo de siempre, pero en plan cutre. Menudo ejemplo están dando los podemistas y, sobretodo, Esquerra Unida.
