El alcalde de la ciudad, Francesc Fernández, debería de manejar sus relaciones con más tacto y finura, compartiendo sus minutos de gloria con el resto de protagonistas, puesto que eso de ir de superman, de yo solo puedo, va a terminar pasándole factura. Esta mañana, sin ir más lejos, se ha celebrado en Valencia una reunión entre los trabajadores de Bosal, el subdelegado del Gobierno y el director de la Tesorería de la Seguridad Social, a la que han asistido el portavoz del PP, Sergio Muniesa Franco y la secretaria general de CC.OO. Begoña Cortijo. De esta reunión se va a enterar por la prensa el señor alcalde y su mano derecha, la concejala y diputada autonómica, Teresa García. El miércoles pasado se reunió la jefa de CC.OO con María José Mira, secretaria autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, de este encuentro tampoco sabrá nada el señor alcalde y su número 2. Es evidente que donde las dan, las toman.
El otro día, cuando vino el conseller de Economía, Rafael Climent, a reunirse con los trabajadores de Bosal, protagonizaron el acto, además del alto cargo, Francesc Fernández y Teresa García. De los socios de Gobierno de Sagunto, ADN Morvedre o Esquerra Unida, ni rastro, ni tampoco se le dio juego a la jefa del sindicato de CC.OO., Begoña Cortijo. Estas cosas, con el PP no pasaban. Se podría decir que, tanto Alfredo Castelló como Sergio Muniesa, cuidaban más las relaciones. Es posible que la primera autoridad local piense que de la misma forma que ningunea a sus socios de Esquerra Unida, y no pasa nada, puede hacerlo también con los responsables del sindicato, pero se equivoca. Es posible que entre los ediles de EU y la secretaria general de CC.OO. exista alguna afinidad ideológica, pero poco más. A buena hora iba a permitir la señora Cortijo el trato que el señor alcalde le brinda al grupo municipal que lidera Guillermo Sampedro. Pero ese es otro tema.
Por otro lado, los socialistas ya están empezando a caer en la cuenta de que el señor alcalde y su número 2, Teresa García, intentan acaparar todo el protagonismo en la ciudad, hablando en nombre de la Generalitat como si no hubiera más partido en el Gobierno autonómico que Compromís, cuando el PSOE, además de ocupar la Presidencia del Consell, también dirige importantes áreas en ese ámbito. Así pues, la visita de Cipriano Ciscar de ayer jueves, habrá que encuadrarla dentro de ese toque de atención y llamada general con la que los socialistas pretenden recordar a los ciudadanos de este municipio que ellos también existen, también deciden y tienen mucho que decir, sobre todo, ahora que vienen las elecciones generales.
