Hoy, a escasos días de mi finalización como concejala en el consistorio saguntino, quiero recordar, además de estos cuatro años, los años pasados como presidenta de Iniciativa Porteña y recordar las vivencias e historias que nuestra gente contaba en la antigua sede y que nos informaban e instruían sobre las penurias y alegrías de tiempos pasados por ellos y que unas veces habían sido buenos y otras no tanto. Y sobre todo quiero recordar a aquellos porteños que nos hicieron las tardes tan amenas y que por desgracia ya no están entre nosotros.
La salud y los años me dicen que tengo que dar un paso al lado de la vida política activa y dejar que gente más joven coja el testigo de nuestra lucha por El Puerto y continúen con nuestro sueño porteño de conseguir la segregación.
Me viene a la memoria un escrito que hice en 2021 con el título de Dónde está mi pueblo y quiero recordárselo a todos los porteños para que no caiga en el olvido el nacimiento y razón de ser de Iniciativa Porteña para que este sentimiento que nos une perdure.
El escrito decía así…
«Este enero se cumplieron 26 años de la creación de nuestra asociación Iniciativa Porteña y a mi mente acudieron recuerdos de aquella gran celebración del 25 aniversario que celebramos en el hotel del polígono y que tan acogedora y amena salió. Sobre todo, vino a mi mente aquel Sueño que originó el principio de nuestra lucha por conseguir un pueblo libre y próspero. Sueño que hoy quiero acercarlo a todos a través de este escrito, para que nunca se nos olvide quienes somos y de donde venimos.
Mi discurso de celebración dice así:
Hoy nos encontramos recordando y festejando el Sueño, sueño con mayúsculas, que tuvieron hace 25 años unos porteños mientras se reunían en el pub Mediterráneo 37 para tomar unas copas y charlar sobre sus problemas e inquietudes sociales.
Sueño, que como el de Martín Lutero King, hablaba de Libertad, Dignidad y Justicia para sus gentes, en nuestro caso, esos valores sociales fueron arrebatados a nuestro pueblo por las fuerzas oligarcas de Sagunto, que desde su nacimiento en el 1907 se vio abocado a sufrir primero espaldarazos y privaciones y posteriormente condena al abandono y explotación por parte de los sucesivos Consistorios.
Estos porteños: Raúl Navarro, Ignacio Márquez, Pedro Fernández y Felipe Andrés a los que se unieron posteriormente Manolo Gallart, Pepe Grimaldo, Ricardo Claramonte, Ana Mellado y otros que ahora mismo no me vienen a la memoria, sintieron la necesidad y el impulso de retomar el legado que, por tres veces, intentaron nuestros mayores para conseguir la segregación de El Puerto y que por tres veces les fue denegada, dos por las autoridades y otra por las circunstancias sociales.
Para iniciar este arduo camino los primeros socios crearon una Comisión Gestora el 31 de enero de 1995, compuesta por Raúl Navarro, Manolo Gallart, Dionisio Martín, Felipe Andrés, José Ruiz y José Fernández para la elaboración de los estatutos y presentación en el acta de constitución de la creación de una Asociación que se llamó Iniciativa Porteña, cuyas principales motivaciones y razón de ser eran, por un lado, seguir luchando por la Segregación y por otro “Difundir y defender las señas de identidad propias de El Puerto”. En este mismo acta se reflejó la elevación de un escrito a la Dirección General de Justicia, solicitando el visado de los estatutos y la inscripción de la Asociación en el correspondiente Registro, escrito que el 3 de abril de 1995 fue resuelto por el Jefe del Servicio e inscrito en el Registro de Asociaciones de la Generalidad Valenciana. Con esto quedaba legalizada nuestra asociación.
Nosotros, ahora, hemos tomado el testigo de la realización de este SUEÑO y es deber y obligación de todos los asociados dejar de lado las tendencias políticas y religiosas individuales que nos separan y unirnos bajo una misma bandera en la lucha por conseguir los fines de su creación: la Segregación y la “Difusión y defensa de las señas de identidad propias”, además de una mas que hemos incorporado últimamente: Trabajar por y para El Puerto».
Releyendo este mensaje me hace reflexionar y analizar porqué hemos pasado de aquella sociedad solidaria y plural en sus orígenes a otra que cada vez se vuelve mas impersonal, apática y falta de arraigo. Y solo me viene a la mente la pérdida del puntal que representaba la fábrica y su entorno para nuestro pueblo y que, desde su desaparición, seguimos sin encontrar el objetivo común que nos provoque el sentimiento necesario para sentirnos pueblo y que, cuando nuestros vecinos hablen de su pueblo, piensen en el Puerto, no en el de sus mayores. Y el logro de este objetivo lo tenemos que conseguir todos unidos.
Muchas gracias a todos por vuestro cariño hacia mí y deciros que hasta pronto.
Pilar Berná García
Concejala de Iniciativa Porteña
