Cuando una persona muere, sus familiares o sus allegados, tienen dos formas de terminar el funeral: una sería dar sepultura en tierra o bien en un agujero de nicho en la pared, y otro, incinerar su cuerpo. Si es en tierra o nicho, su cadáver estaría ahí hasta que, o bien se le sacara por alguna circunstancia especial, como por ejemplo para ponerlo con otro familiar, o porque después de muchos años, según la Ley, no sé, no lo conozco, se permitiría sacar los restos. Si es por incineración, las cenizas que quedarán de ese cuerpo, estarían a disposición de los familiares que podrían hacer con ellas lo que quisieran. Hasta aquí creo que puede ser lo normal pero….

Lo que hacía que ese cuerpo estuviera vivo, que respirara, que pensara, que amara, ¿dónde está? Si era Alma, ¿a dónde ha ido? Si era Espíritu y la persona era creyente, se supone que estará en el Reino de Dios, y si era Energía, ¿estará en el Cosmos? Francamente yo no tengo referencias de ninguno. No conozco cómo serán estas cosas en el reino animal, pero pienso que los humanos estamos faltos de una gran información sobre estos temas que, por lo demás, son demasiado importantes como para no profundizar más en ello

No pretendo hacer polémica sobre esto, porque además puede que sean elucubraciones de mi mente que no alcanza más allá de los cirrostratos, hablando meteorológicamente, pero sería de una satisfacción enorme que quien esté capacitado para ello, aclarara a los demás por qué leyes se rigen estos incomprensibles misterios, a qué señales hay que atender para orientarse un poco, ¿es quizás por la Fe en Qué o en Quién, por la Naturaleza, por el horóscopo, por los posos del café? No creo en nada de eso así que tendré que buscar por otros derroteros.

No es cuestión de broma, es muy seria la cosa. Cómo puedo saber hacia dónde puedo dirigir mi búsqueda si no sé qué es lo que se escapa de nosotros cuando nos vamos, y tengo una perenne necesidad de encontrar un camino porque estoy buscando algo importantísimo para mí. Algo que me ha dejado lleno de dudas y preguntas dificilísimas de entender. Alguno puede pensar que es un tema muy manido y que ya se ha hablado y escrito mucho sobre ello, pero ¿de verdad podemos dar por zanjado algo tan importante como es la posible prolongación de nuestra existencia en otros estadios y o dimensiones?

Es más importante averiguar o entender el lenguaje de las arañas que saber si nos podemos ver o tocar en nuestra posible transformación. Sé que es muy difícil lo que estoy proponiendo, pero pienso que los sabios e intelectuales del mundo entero, debieran interesarse un poco más de éstas cuestiones porque «nos va la vida en ello».

Saludos

Luis Ballester Moreno