A principio de la legislatura el alcalde afirmaba que, a partir de ahora, con el gobierno de Sánchez en el Estado y de Puig en la Generalitat, se iba a notar en los presupuestos. Pero presupuesto tras presupuesto vemos como la llegada de las inversiones se dilatan con las más variopintas excusas y nunca llegan.

Cualquier reivindicación histórica sigue sin recogerse y, la marginación que sufre nuestro municipio acumula años de olvido sin que, en ningún caso, se desbloqueen y nuestra ciudad reciba el trato que se merece.

No se puede sacar pecho por las inversiones que proceden de compromisos ya adquiridos en años anteriores, ni apelar a la decisión de invertir de una empresa privada como Volkswagen, para salir del paso a la marginación que supone la falta de inversión pública de los presupuestos del Estado o de la Generalitat. Lo que se demuestra que ese triunvirato de Moreno, Sánchez y Puig es letal para nuestra ciudad.

A los presupuestos de inversión para nuestra ciudad, les está pasando como a los protagonistas de Esperando a Godot, que esperan en vano junto al camino y nunca llega, … «pero mañana seguro que sí».

Algo de esto es lo que pasa por ejemplo con el castillo de Sagunto, el millón de euros que nunca se recibe.

Solo a lo largo de esta legislatura hemos visto como en abril de 2021, con visita del ministro Uribes incluida, se comprometió a que antes de finalizar ese año estaría finalizada, para luego su sustituto Iceta, comprometerlo nuevamente para 2022, y después, anunciarlo con cargo a fondos europeos y a repartir entre 5 actuaciones, sin fijar su cuantía.

Esta semana, hemos vuelto a recibir visita, esta vez del secretario de estado de cultura del ministerio y esperábamos que no viniera de nuevo a prometer el millón por cuarta vez. Pero así lo hizo y la inversión de un millón de euros proyectada desde 2019, se retrasa hasta el verano de 2023.

Deja claro que las visitas de ministros y secretarios de estado y anuncios de inyecciones económicas no sirven para que comiencen las esperadas inversiones. Un modus operandi semejante al que realiza el socialista Darío Moreno y su tripartito en el ámbito local.

Lo que llevamos años denunciando y catalogando de bochornoso, ahora lo denuncian hasta los propios socios de gobierno del PSOE. Compromís lo tacha de burla y EU ve decepcionante y escaso el montante después de tanto anuncio.

Ahora resulta que, tras los nuevos retrasos anunciados, no comenzarán hasta verano del año que viene. Lo vergonzoso es que el propio ministerio, después de reiterados aplazamientos, se había comprometido a empezar en septiembre de este año y finalizar las obras en marzo del 23. Ahora su finalización no se contempla hasta otoño del 2026.

Unos retrasos acumulados a los que se suma que, desde hace meses la instalación museística permanece cerrada, e incrementa esa sensación de abandono a la que nos tienen acostumbrados por mucho que se esmeren en fijar nuevos plazos y anunciar periódicamente la inversión para salir del paso.

No han dejado de ningunear nuestro patrimonio y mientras, el alcalde Darío Moreno, los justifica. Cuando, en el enésimo olvido el castillo no aparecía en los presupuestos del Estado, que la financiación iba por otro lado y, cuando la inversión no se va a realizar este año, asegura que los nuevos plazos se cumplirán.

Después de más de 3 años y cero inversiones, sin noticias del compromiso de realizar inversiones periódicas, ni del millón que nunca se recibe, nos hemos ganado el derecho a mostrar desconfianza porque la noticia realizada esta semana, no es muy diferente de las anteriores. Poca credibilidad tienen.

La decepción y el sentimiento de burla reiterada que se lleva produciendo desde hace años, no la recompone un nuevo anuncio, mientras desde el gobierno local, por boca del alcalde, se ha ido justificando sus aplazamientos como en tantas y tantas ocasiones.

Como con el pantalán que al final, anuncian ahora una inversión para su desmontaje de urgencia cuando la realidad es que solo han actuado cuando se les ha caído y ya no queda vestigio alguno patrimonial que recomponer. El riesgo de más derrumbes lleva a su desmantelamiento. Esa no es forma de proteger el patrimonio.

Esperemos que no se tenga que dar esa circunstancia con el Castillo y sus murallas y esperar a que acontezca una amenaza real de pérdida para que actúen porque, entonces, vendrán las lamentaciones.

Sergio Muniesa Franco
Portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Sagunto