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Balance de un año gris

Escrito por Sergio Muniesa Franco
Jueves, 30 Diciembre 2021 21:00

Se acerca el 31 de diciembre y como todos los años, es momento de hacer balance. Tres años de un tripartito, el presidido por Darío Moreno, que lejos de mejorar, tras unos inicios que justificaban sus carencias con el “somos nuevos” sin serlos, a llegar a este punto de la legislatura en donde se les ha apoderado el color gris de la mediocridad.

Durante el periodo de la pandemia, la excusa de la situación del momento disimulaba la realidad y les servía para ocultar las carencias de la gestión. Pero eso hoy, a los vecinos, no les convence. La gente ve como el pago de la hipoteca, la luz, la compra, … no admite excusas, y hay que trabajar para hacerles frente.

El ciudadano de a pie ya no les compra que, por culpa de la COVID, el gobierno con más liberados y más caro de la democracia, vaya al ralentí.

La excusa del “somos nuevos” se cae, porque el problema real es que llevamos 7 años de tripartito, sin dar continuidad a las inversiones, y demuestra el poco peso político de este gobierno que se traduce en que tanto la administración del estado como la Generalitat, donde gobiernan los mismos, pasan de largo en sus presupuestos y sufrimos el desprecio de los gobiernos del cambio. El tripartito surgido del “pacto de la gerencia”, no son ni para exigir a la Generalitat la inmediata rehabilitación del conjunto y su puesta en marcha como referente educativo y cultural. Porque han pasado de la reivindicación, a tapiar, a votar en contra las peticiones que exigen a los Presupuestos su financiación, y a asumir el pago de proyectos cuando arrecian las críticas de su parálisis.

Por un lado, se quejan, y por otro muestran su complicidad con el voto a favor de unos presupuestos que nos ningunean.

Desde que comenzó la legislatura utilizan los recursos públicos en su política de anuncio a bombo y platillo. La foto, la propaganda de inversiones que después de todo este tiempo sigue sin materializarse y que tienen la certeza de que no se van a ejecutar.

Querían ofrecer una imagen. Publicitar el mensaje de que eran un tripartito capaz y con una gran facultad de gestión. La realidad, superado las dos terceras partes de la legislatura es que, aun disponiendo del dinero en unos casos, e incluso “inventado” recursos irreales en otros, son incapaces.

Hoy somos más pobres, menos competitivos y estamos más endeudados. El gobierno de Darío Moreno nos lleva a la ruina.

Pagamos más impuestos, rechazan reducciones y bonificaciones y nos toca costear 2 millones más de préstamo. Casi un 40% más que supone que cada vecino tiene que abonar 500 € frente a los 300 de cuando dejamos de gobernar.

Quienes vinieron a rescatar personas, las asfixian porque son incapaces de controlar sus números.

Son un caos que han supuesto tener que sacrificar 7´5 millones en inversiones, para este año, al quedarnos sin préstamo con el que hacerles frente por culpa de haber gastado más de lo que se ingresa el año pasado.

La gestión de estos doce últimos meses debería haber servido para ejecutar esas inversiones, que según afirmaciones del Alcalde, si no se conseguía sería un fracaso.

Y así ha sido, el que debería haber sido el de la recuperación, se ha convertido de nuevo en el del suspenso.

Para combatirlo, de nuevo vuelven a echar mano de los anuncios de años anteriores. A reciclar propuestas que ya les dejamos, cambiándoles de nombre. Se trata de un tripartito que recicla sus propios incumplimientos.

No aciertan ni con las medidas para salir de la crisis, o bien por su falta de oportunidad, o bien, por la falta de agilidad en llevarlas a cabo.

Esta situación pone de relieve que no hay un modelo que marque las líneas políticas de la ciudad. No hay modelo claro, ni gestión efectiva porque si la hubiera no dejarían sin gastar 30 de los 35 millones que han dispuesto para gastar en inversiones para la ciudad.

Este resultado demuestra que ni hay gestión, ni nada. Todo son incumplimientos en estos años.

Si al menos hubiera noticia de alguna planificación, de que alguien está al mando. Pero con un alcalde que solo se preocupa por salir bien en la foto y usar el dinero público para publicitar anuncios que cada poco tiempo caducan sin resultado, demuestra que no tienen nada nuevo que contar, en definitiva, se impone el gris en una ciudad que necesita urgente luz y color.

Sergio Muniesa Franco
Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sagunto